El director general del Agua del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, contesta a las interrogantes formuladas por el ingeniero técnico cacereño Ramón Pavón, en relación con el proyecto de conducción para el abastecimiento de agua potable a Cáceres, mediante el trasvase de la presa de Portaje.

El primer interrogante se refiere a la anulación del referido trasvase (cosa que ya se ha formulado desde otros sectores) de la misma forma análoga que se anuló en su día el trasvase del Ebro. El señor director contesta que dicha obra está declarada de interés general por la Ley 10/2001 y que para su anulación procedería una disposición del mismo rango legal emitida por el Parlamento.

Nosotros preguntamos ¿y quién propondría al Parlamento la anulación de la Ley 10/2001? ¿Sería el propio ministerio el que haría esta propuesta?

Nos consta, por haber sido uno más de los muchos ciudadanos que se han dirigido al señor Arias Cañete, de las quejas que este proyecto ha suscitado entre la ciudadanía, bien por sus dificultades de construcción, como por el alto precio que hemos de pagar, sin saber a ciencia cierta si el problema de abastecimiento de los núcleos urbanos de Portezuelo, Aliseda, Arroyo de la Luz, Malpartida de Cáceres, Casar de Cáceres, Sierra de Fuentes, Torreorgaz, Torrequemada, Torremocha, Botija, Santa Marta de Magasta y Monroy, pueden ser atendidos desde una presa cuya capacidad de embalse es de 23 hm3 y, que a su vez tiene que recibir agua del pantano de Gabriel y Galán.

La ejecución de estas obras estaba prevista en dieciocho meses, y ahora la Confederación Hidrográfica del Tajo se descuelga que hasta el 2016 no se darán por finalizadas. Mientras tanto, la falta de lluvias puede crear un grave problema en la toma sobre la cola del pantano de Alcántara si baja el nivel del agua por debajo de la cota 192.

Esperamos que, por una vez, los responsables políticos de Cáceres y de la Junta de Extremadura, se preocupen de este grave problema como es el agua.

Fernando García Figueroa **

Cáceres