Las fiestas que los vecinos del barrio de Santiago celebran por tradición desde el año 1993, verán reducir notablemente su programa de actos como consecuencia de la falta de una asociación de vecinos en la zona. Fuentes de la directiva de la anterior asociación de vecinos han transmitido a este diario el malestar por la crisis que atraviesa el barrio ya que ningún grupo vecinal quiere hacerse cargo de una asociación que fue disuelta hace unos meses tras la dimisión de toda su directiva.

Las mismas fuentes han afirmado que si nadie se hace cargo del colectivo vecinal, no se celebrarán algunos actos como los juegos para niños, así como el enredo tradicional, la actuación rociera y la verbena popular. Por otro lado, sí se ha confirmado la celebración de la misa y la procesión con el santo patrón por las calles del barrio.