El PP de Casar de Cáceres instó ayer al PSOE y al alcalde, Florencio Rincón, que dé explicaciones por haber consentido el vertido de restos óseos en la escombrera. Para el portavoz popular, José Ramón Hidalgo Vicho, el suceso ha causado en la población "indignación", ya que "el alcalde tenía conocimiento de lo que estaba sucediendo, si bien ha preferido durante estos años mirar a otro lado". "Rincón sabía lo que estaba sucediendo porque en decenas de ocasiones el PP ha llegado a pedir al gobierno el control de vertidos en la escombrera, así como el cierre de la misma".

Por su parte el alcalde, Florencio Rincón, calificó como "totalmente falsas" tales acusaciones y recriminó al PP "buscar un rédito político de una situación desagradable". Rincón aseveró que "ni he autorizado, ni he consentido, ni tenía conocimiento" de que se estuvieran produciendo ese tipo de vertidos y expresó "su más profundo respeto" por el trabajador señalado como autor, que está contratado por la parroquia de la que depende el cementerio. El alcalde añadió que emprenderá acciones legales contra el portavoz del PP por haber "menoscabado mi honor".