"Estoy muy emocionada porque me apunté hace ocho años y cuando me dieron para el 2009 me parecía que nunca iba a llegar este día". Así de ilusionada se mostraba ayer Mari Carmen Mahíllo, persona que ha tenido el privilegio de ser la mayordoma de las Fiestas de Los Negritos de San Blas que se celebraron ayer en Montehermoso. En su caso, el honor de recibir la mayordomía ha sido por una promesa en relación a una sobrina suya, María, que ayer también participó de la fiesta acompañando a su tía mientras ésta, junto a otros familiares, portaba las andas que sostenían la imagen del santo en la procesión que partió desde la ermita de San Bartolomé hasta la plaza Mayor.
La lluvia dio una tregua, lo que permitió que cientos de montehermoseños salieran a la calle a festejar un evento declarado de Interés Turístico Regional que cada año atrae a miles de curiosos de toda la región.
Cordones y cocido
Como es tradición, no faltaron los tradicionales cordones de colores que según la leyenda protegen la garganta de todo mal. "Hemos comprado 5.000 metros de cordón y hemos preparado para vender 8.000 cordones de distintos colores", comentó la mayordoma. Entre tanta tradición, los cohetes, un total de 120, se lanzaron al aire. Las danzas de Los Negritos volvieron a encandilar a mayores y pequeños que se congregaron frente al ayuntamiento. Después y para reponer fuerzas, un gigantesco cocido extremeño para 6.000 personas por cortesía del ayuntamiento montehermoseño.
