Cuatro familias que residen en Casares de las Hurdes manifestaron ayer su indignación por lo que consideran "un engaño por parte del alcalde del pueblo". Según explicaron a este diario, en octubre del año 2002 el alcalde les aseguró que si se quedaban a vivir con sus hijos el ayuntamiento les daría un empleo y una vivienda.

Angel Martín y Rosa María Carrasco aceptaron la propuesta y se quedaron a vivir en el pueblo con su hijo de 7 años a cambio de una casa y un contrato de trabajo por parte del ayuntamiento. Pero después de 11 meses, según aseguró esta pareja, el alcalde ha mandado un escrito a los dueños de las casas donde residen las familias advirtiéndoles que en octubre del 2003 el ayuntamiento no se hará cargo de los alquileres.

Martín señaló que este hecho le ha sorprendido puesto que considera que las casas y el trabajo debe correr por cuenta del ayuntamiento mientras los niños estén escolarizados en el pueblo. La mujer de Martín aseguró que si llega a saber que un año después el ayuntamiento iba a dejar de pagar su casa, "no hubiéramos venido a vivir aquí", dijo.

RESPUESTA MUNICIPAL

El alcalde, Olegario Rodríguez, afirmó que el ayuntamiento "va a seguir pagando el alquiler", y respecto a los contratos señaló que no se renuevan al ser obras municipales que han finalizado.

El director general de Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Campón, dijo que este año la Consejería de Bienestar Social ha dado 36.317 euros al Ayuntamiento de Casares para un programa de intervención social que afecta al área de vivienda, empleo y educación y donde tendrían cabida las necesidades de estas familias.