Unos setenta vecinos de la localidad cacereña de Valdefuentes representarán este sábado, día 15, a partir de las 19.30 horas, la quinta edición de La Pasión Viviente de Cristo, un evento que el año pasado congregó a un millar de visitantes.

Es una cita cultural de carácter religiosa que desde 2013 moviliza a todo el pueblo. Igualmente, es un evento de «atracción turística», ya que son muchos los vecinos de localidades cercanas los que se acercan a ver La Pasión de Valdefuentes.

La representación, que dura en torno a dos horas, comenzará en la plaza de España, pero también serán escenarios las calles del municipio, así como el huerto de los olivos.

Estos escenarios albergarán, entre otros acontecimientos, la entrada de Jesús en Jerusalén en burro o el ahorcamiento de Judas. De modo que, «se completa todo lo que significa la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret», explicado el párroco de Valdefuentes, Juan Antonio Aroca.

En esta quinta edición no se han incorporado nuevas escenas, como la del año pasado de la entrada de Jesús en Jerusalén a lomos de un asno, sino que se ha trabajado más en consolidar el guión de la representación, el cual está ambientado además con música, y en mejorar el decorado y la escenografía.

Unas 12 personas encarnan los papeles protagonistas del evento, como son Jesús, la Virgen María, Poncio Pilatos, Caifás, o Judas, entre otros. Por ejemplo, Ambrosio Guillén, que encarna la figura de Jesús, señala que su principal reto es «emocionar a la gente», ya que, según destaca, en Valdefuentes hay «mucha tradición» de Semana Santa.

Pedro Álvarez, que representa la figura de Poncio Pilatos, vive su papel con «mucha pasión». Rafa Rubio, que tiene el papel de Caifás, indica que lo más gratificante es que la gente conozca y vea exactamente como era La Pasión.