Y van seis. El Rey no pudo tener ayer un día más completo; en Galicia y el día de san Juan, anunció que será abuelo por sexta vez (en la foto de arriba, con la Reina) ya que su hija mayor, la infanta Elena, (en la foto de la izquierda, ayer en su coche, en Madrid) será madre por tercera vez en diciembre. Los Reyes tienen cinco nietos: Froilán y Victoria de Marichalar, y Juan, Pablo y Miguel Urdangarín.
A las once de la mañana, el Rey se encontraba en A Coruña para recibir de manos de Rodolfo Martín Villa, comisionado del Gobierno para el seguimiento de la catástrofe del Prestige, el informe de los trabajos realizados en el litoral gallego. A su llegada, Juan Carlos recibía las felicitaciones por su onomástica cuando sorprendió diciendo: "Vamos a ser abuelos por sexta vez," sin determinar al principio cuál de sus hijas era la embarazada. Pronto puntualizó que era Elena quien iba a empatar a hijos con su hermana Cristina.
El Rey quiso anunciar la buena nueva en Galicia, ya que la infanta Elena y su marido, Jaime de Marichalar, llevan el título de duques de Lugo. Era su manera de hacer a los gallegos partícipes de las buenas noticias, aunque el anuncio desvió en parte el centro de atención del viaje oficial.
En Muxía, en gallego y ante los alcaldes de las poblaciones del litoral, presidentes de cofradías de pescadores, armadores y otros afectados por el desastre del Prestige, el Rey (en la foto de la derecha, recibiendo una maqueta de una típica dorna) alabó "la valentía, la fortaleza y la capacidad de reacción" de las gentes de Galicia que, "con el apoyo de toda España, han sabido superar las adversidades".
Donde en la visita que el Rey hizo en diciembre, tras el desastre, hubo tensión, ayer había algarabía y en lugar de peticiones de ayuda, los ciudadanos de Muxía llenaron el puerto con el simple ánimo de agradecer al Rey que estuviera con ellos.
TRATAMIENTO EN NUEVA YORK
La infanta Elena y Jaime de Marichalar regresaron hace unos días de Nueva York, en donde el duque de Lugo ha seguido un tratamiento de rehabilitación para paliar las secuelas del derrame cerebral que sufrió en el 2001. Los duques tienen previsto pasar el verano en España. El desarrollo del embarazo decidirá sobre el regreso a EEUU o la permanencia en España de la pareja. El nuevo hijo será el quinto en la línea sucesoria.
