Una treintena de cooperativas españolas, especialmente de Extremadura, Navarra y Cataluña, se verán afectadas por la norma que plantea Bruselas y que implica recortes en las ayudas comunitarias para las organizaciones de productores de frutas y de hortalizas para transformación. Así lo indicaron ayer fuentes de Cooperativas Agro-alimentarias, quienes detallaron que entre los afectados figuran otras empresas privadas que no operan bajo régimen cooperativo en otras comunidades como Murcia, pero que transforman frutas y hortalizas.

La organización señala que entre las entidades afectadas por la medida, figuran cooperativas y otras empresas que participan en la elaboración de zumos de cítricos, melocotón y pera; aquellas dedicadas al concentrado de tomate; a conservas como las de pimiento o espárragos y las especializadas en elaborar frutas y hortalizas congeladas, frutos secos tostados, plantas aromáticas y pimentón. Por el contrario, no se verán afectas, al excluirla del texto final, la industria dedicada a la cuarta gama (frutas y hortalizas cortadas, lavadas y listas para comer).

Con todo, Cooperativa Agroalimentaria explica que el sector español está más enfocado a la venta de estos productos en fresco y se verá menos perjudicada que otros países como Italia, con mayor peso de la transformación, y que se han introducido medidas transitorias que permitirán culminar los actuales programas operativos en curso o los ya aprobados, con las antiguas reglas de cálculo.

Los países de la UE permitieron el martes que saliera adelante una normativa que en la práctica bajará la ayuda a los productores de fruta destinada a la industria y que será aprobada formalmente por la Comisión Europea (CE) en los próximos días. Hasta la fecha la regulación de ese sector establece que las Organizaciones de Productores, como las de Frutas y Hortalizas reciben apoyos de la UE para cofinanciar parte de sus inversiones y esas primas se calculan según el valor de la producción comercializada o facturación.

Cooperativas Agroalimentarias resalta que, desde la reforma de la OCM de frutas y hortalizas del 2007, se permitía contabilizar todo el valor la comercialización de fruta para transformación para el cálculo de las ayudas comunitarias al sector y, con el nuevo reglamento, solo podrá aplicarse un porcentaje. De este modo, se utilizarán nuevos índices que implicarán menores ayudas.

Las mismas fuentes detallan que las organizaciones de productores afectadas serán solo las que participan en la transformación como, por ejemplo, las que venden producto procesado porque disponen de una fábrica dentro de la cooperativa o una filial para este fin. Además, destacan que no solo les preocupa el número de cooperativas afectadas, sino "mucho más" que la nueva norma supone una "intervención de la Comisión" que va en contra de los "principios básicos" de la OCM y que supone una "contradicción" sobre los valores defendidos por la UE hasta ahora.