La desaparición en julio de la tarifa nocturna afectará a 22.000 familias extremeñas que actualmente la tienen contratada. Se sustituirá por la denominada de discriminación horaria, con más horas en las que el cliente puede beneficiarse de una rebaja en su factura (desde las diez de la noche al mediodía en verano), pero reduce el descuento al que pueden acogerse los usuarios por su consumo durante estas horas y se le sube el precio de la luz en las horas punta.