Los sindicatos médicos en Extremadura exigen a la Administración que se cumplan los acuerdos pactados y que se siga trabajando para mejorar las condiciones laborales de los profesionales sanitarios de Atención Primaria. Así lo han manifestado los portavoces de algunas de las principales fuerzas sindicales del sector, que han coincidido en señalar que el acuerdo alcanzado a finales de la pasada primavera con la Consejería de Sanidad y los responsables del Sistema Extremeño de Salud (SES) solo es un primer paso.

"Estas medidas van a servir para paliar los problemas que tenemos, como ampliar algo el tiempo de las consultas o evitar las aglomeraciones en los centros de salud. Sin embargo somos conscientes de que no es una solución definitiva", apunta Felipe Bachiller, secretario Regional de Sanidad en la Federación de Servicios Públicos del sindicato UGT. Ellos, junto a la Convergencia Sindical de Médicos y Ayudantes Técnicos Sanitarios (Cemsatse), CSI-CSIF y el Sindicato Auxiliar de Enfermería (SAE) suscribieron el acuerdo.

Según explica Bachiller, este compromiso de la administración va a permitir la creación de nuevas unidades de atención, la ampliación de las plantillas y la extensión de los horarios de atención. Sin embargo, advierte de que estas medidas sólo son para amortiguar los problemas que actualmente tiene la Atención Primaria y reconoce que "va a haber épocas, como periodos de vacunación o en las semanas de mayor incidencia de la gripe, en las que se van a producir aglomeraciones". Por eso, desde UGT señalan que la Administración debe seguir buscando soluciones para ampliar la cifra de médicos, "porque si hay más profesionales disminuye el número de pacientes por consulta y se alivian buena parte de los problemas".

MEJORA RETRIBUTIVA Por su parte, la presidenta del sector sanitario CSI-CSIF, Rosa María Ramos, admite que la mayor parte de los problemas se reducen a la falta de personal y que se han adoptado medidas para subsanarlo, como el traslado de algunas consultas a horario de tarde (una decisión conocida en el sector como "jornada deslizante").

Pero según Rosa María Ramos, es necesario poner el acento sobre otro tipo de circunstancias que mejoren la situación laboral de los médicos. Es el caso de la resolución de la violencia contra los profesionales, una circunstancia sobre la que afirma que "se producen muchos más casos de los que se denuncian" y que "hay mucha violencia". A ello suma las altas cargas de trabajo que supone el papeleo, un problema que esperan que se resuelva con la digitalización del sistema sanitario (proyecto JARA) y la implantación de la receta y la tarjeta sanitaria digitales.

A esto añade la mejora de las condiciones retributivas. "Con el último acuerdo se han aumentado algunas retribuciones, pero puede que solo sirva para taponar el problema". De hecho, Rosa María Ramos opina que la situación económica es la principal causa de la fuga de médicos, un fenómeno que, bajo su opinión, sí se está produciendo en Extremadura. "En otras regiones no solo reciben mejores incentivos, sino que encuentran más recursos, menor número de pacientes y menor acumulación de trabajo", advierte.

INCUMPLIMIENTO Más críticos se muestran desde el Sindicato Médico de Extremadura (Simex), integrado en Cemsatse. Su responsable para Atención Primaria, Mercedes Padilla, que muchos de los puntos del acuerdo no se están cumpliendo. En este sentido, apunta que es necesario aumentar las plantillas de médicos e incentivar al personal contratado, así como dotarles de mayores recursos.

Padilla señala que las soluciones pasan por un aumento presupuestario, fijar el número máximo de consultas a 25 por día, reducir el peso burocrático, la implantación del sistema informático y garantizar las sustituciones, entre otras medidas.