El ayuntamiento continúa con la campaña de poda que inició en octubre y terminará en marzo. La campaña se ha planificado por barrios, detectando qué árboles y zonas necesitan esa poda. «No se podan todos los árboles todos los años, ya que no es necesario y es un sufrimiento innecesario para los mismos», indicó la concejala María José Pulido. Ayer se podaba en Virgen de Guadalupe. Por lo que se refiere a la campaña de reposición de árboles en alcorques vacíos, «se hace entre enero y febrero, que son los meses más fríos. Son ideales para la plantación, ya que es cuando se puede plantar en condiciones óptimas para que el árbol agarre y tire hacia adelante», apuntó la edil, para quien «los árboles son un patrimonio muy importante de nuestra ciudad y trabajamos para protegerlo y conservarlo, por los beneficios que supone».