Los fuegos artificiales provocan daños en dos vehículos en el ferial de Cáceres

Susto en el aparcamiento del ferial cacereño. Una pavesa de los fuegos artificiales, con los que se ha inaugurado este martes la Feria de San Fernando, ha ocasionado un incendio de pastos en la zona situada a la derecha de la portada principal, donde había numerosos vehículos estacionados. Aunque la superficie del fuego ha sido muy limitada por la acción de los bomberos, las llamas han alcanzado dos vehículos, un Mini y un Dacia. Esto ha generado nerviosismo entre el público que acaba de ver el espectáculo pirotécnico en el área del aparcamiento principal.

El primero de ellos se ha visto afectado en los bajos: los componentes plásticos han quedado deformados por el calor. El segundo ha sufrido daños en el tapacubos trasero izquierdo, que ha llegado a quemarse, y en el paragolpes, visiblemente perjudicado. Pero a primera vista ninguno de los turismos ha sufrido daños de mayor alcance.

El problema ha residido en que los cohetes han provocado dos incendios al mismo tiempo. El primero, de mayor envergadura, se ha iniciado en una zona alejada de los coches aunque avivado por el fuerte viento. Han tenido que acudir dos tanquetas del Sepei que lo han sofocado al instante. Simultáneamente ha comenzado otro fuego junto a los vehículos, hasta donde han llegado de inmediato una pareja de municipales y el todoterreno del Sepei que coordinaba las tareas y que ha apagado las llamas con sus medios, evitando de este modo males mayores en los dos turismos afectados.

Los efectivos del parque cacereño han revisado los coches dañados, levantado el capó y revisado los bajos para cerciorarse de que no había más consecuencias, y además han refrescado el entorno para evitar que el fuego pudiera reavivarse.

En la zona también han intervenido agentes de la Guardia Civil. Todos los efectivos controlaron la situación en pocos minutos.

Cabe recordar que en los fuegos artificiales de apertura de la Feria de San Fernando 2019 también se produjo un incendio de amplias dimensiones por la acción de las pavesas, que tardó una hora en poder sofocarse. La línea de fuego alcanzó unos 300 metros y quedaron calcinados 2.000 metros de pastos.