Segundo bolo en el Recinto Hípico

«Necesitaba ver a Robe tocar en Cáceres; en su tierra»

Público de Madrid, Segovia, Alicante, Sevilla, Granada... se desplazan para disfrutar de la actuación de Robe en casa

Manolillo Chinato subió al escenario en un concierto que finalizó pasadas la una y media de la madrugada

Las dos citas congregan a más de 15.000 personas para disfrutar de su particular filosofía del rock

Eduardo Villanueva

Eduardo Villanueva

«Necesitaba ver a Robe tocar en casa; en su tierra». Manu Bayona se ha hecho más de 500 kilómetros para disfrutar del tercer concierto de su nueva gira ‘Ni santos ni inocentes’, pese a que ya tiene entradas para los bolos de Sevilla, Granada (donde reside) y Madrid. «Y me estoy pensando si acudir a la cita de Úbeda».

Bayona destacaba ayer el concierto de Cáceres por ser el escenario donde el artista placentino se siente más en casa. Pero también apunta al concierto de Sevilla (dentro del Icónica Fest), porque será en la plaza de España «y es un espacio único para ver un concierto de Robe». La pareja de Bayona es placentina, así que los lazos personales también han jugado un papel importante en este periplo de cientos de kilómetros en un viaje relámpago.

Peregrinación

Un recorrido que también han hecho público de Madrid, Segovia, Alicante, Sevilla y, por supuesto, de diversas partes de la región extremeña, que se ha desplazado hasta Cáceres para vivir los primeros acordes de esta nueva gira, que comenzó el fin de semana pasado en Valencia y que enlazó con la actuación de este viernes en el Hípico cacereño.

«Buenas noches a todo el mundo», exclamó Roberto Iniesta al inicio del concierto para dar rienda suelta al primer tema: 'Destrozares' (de su segundo disco en solitario), con una playlist que introdujo modificaciones con respecto al concierto del viernes; también en la puesta en escena, con mayor juego de luces.

Después sonaron 'Adiós cielo azul, llegó la tormenta' (de su último álbum) y 'Guerrero' para deslizar los inicios del mapa sonoro de un concierto in crescendo, comenzó con acordes melódicos, sin demasiada carga rockera, para ir (imparable) en ascenso, hasta cubrir la cuota de grandes temas (ya himnos) referentes de Extremoduro; incluida una particular versión de 'Jesucristo García'. Las 8.000 personas que poblaron el Recinto Hípico cacereño recibieron al vocalista, guitarrista y compositor con intensidad, que subió al escenario con 20 minutos de retraso.

El poeta Manuel Muñoz Sánchez, más conocido como Manolo (Manolillo) Chinato, natural de Puerto de Béjar, aunque de alma extremeña, subió al escenario con Robe al final para poner el broche a un concierto que se alargó hasta pasadas la una y media de la madrugada (descanso mediante) y que finalizó, cómo no, con 'Ama, ama, ama y ensancha el alma'.

Manolo Chinato con Robe en el concierto de anoche en Cáceres.

Manolo Chinato con Robe en el concierto de anoche en Cáceres. / CEDIDA

Ya no sorprende comprobar cómo el extremeño reúne a un amplio espectro de seguidores: adolescentes que empiezan a aficionarse a ese rock a caballo entre lo transgresivo y lo lírico, menores acompañados de sus padres y/o madres y adoradores de Extremoduro desde hace más de tres décadas.

Le quedan una pléyade de citas musicales en los próximos meses y, parece ser, que su intención será parar después; al menos, durante un par de años. Pero eso será después de echarse miles de kilómetros a la espalda con esta gira que, según sus propias palabras, «va a ser la mejor». Y que finalizará el próximo 9 de noviembre en Vigo.

Una gira que ha iniciado con buen sabor de boca, porque en abril recibía el disco de oro por las ventas de su cuarto disco, ‘Se nos lleva el aire’. El álbum vio la luz el pasado 15 de diciembre y nada más salir se colocó en el número uno, en el que estuvo todas las navidades.Y es que después de la revolución sonora que supuso ‘Mayéutica’ eran muchas las expectativas puestas en el nuevo trabajo de Robe, que ha cumplido con las expectativas, a tenor de las vibraciones que emanaban del público anoche, en el Hípico cacereño.

«Es nuestro tesoro», señalaba ayer el cacereño Carlos Marzal; «un genio absoluto» coreaban un grupo de admiradores. 

Nueva cita extremeña en agosto

No será la última vez que tengamos la oportunidad de escuchar a Robe tocar en Extremadura, volverá el próximo 17 de agosto a ofrecer un bolo por estos lares; concretamente, en Almendralejo. En cualquier caso, la peregrinación a Cáceres estaba muy justificada, por ser vecina de su ciudad natal y por ser dos conciertos muy próximos a su cumpleaños: el pasado 16 de mayo sopló, nada menos, 62 velas.

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