El Centro de Tratamiento de Residuos Animales -más conocido como incineradora-, de Almaraz, se puso en marcha a finales del 2005. Actualmente cuenta con 30 trabajadores en plantilla y solo ha paralizado su actividad a raíz de sufrir un incendio, pero siempre ha estado en activo a pesar de las continuas quejas hechas públicas por los vecinos.