La falta de espacio en el cementerio municipal ha obligado a la aprobación de la modificación puntual de Plan Especial de Protección del Casco Histórico de Trujillo para construir en este nuevos nichos. Dado que se trata de un espacio histórico, acotado por la muralla y construido a finales del siglo XVIII no se permite hacer nuevos huecos para enterramientos, "lo que provoca que haya que estar reutilizando nichos", ha señalado el alcalde Alberto Casero. De ahí que haya sido necesaria la modificación del plan urbanístico para poder intervenir en el camposanto, "contando con el visto bueno y asesoramiento de Patrimonio".

La situación plantea la necesidad de construir otro, que costaría dos millones de euros, según Casero. Atendiendo a informes técnicos y a las exigencias de la normativa, uno de los lugares posibles para hacerlo sería la Dehesilla. Por su parte, el portavoz socialista, Fernando Acero, propone que se busque un lugar "más céntrico, que no requiera el uso de transporte".