Tiene 79 años y puso en riesgo la vida de numerosos conductores que circulaban por la A-5, hasta que la Guardia Civil le interceptó a la altura de Trujillo, tras circular más de 30 kilómetros en sentido contrario. Sea por imprudencia o no, el hombre ha sido acusado de conducción de temeraria.

Sucedió el pasado 30 de mayo, la actuación tuvo lugar en torno a las 12,00 horas, cuando la Central COTA de la Guardia Civil y el Centro de Emergencias 112 de Extremadura comenzaron a recibir numerosas llamadas alertando de que un vehículo circulaba por dicha autovía hacia Madrid, por la calzada con sentido a Badajoz, a la altura del kilómetro 270,500, en el término municipal de Puerto de Santa Cruz (perteneciente al partido judicial de Trujillo).

Inmediatamente, se desplazaron al lugar agentes pertenecientes al Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Cáceres quienes, en un primer momento, comenzaron a retener a los vehículos que circulaban en el sentido correcto de circulación para así evitar posibles accidentes.

Instantes después, agentes del Equipo de Atestados e Informes del Destacamento de Tráfico de Trujillo detectaron a un vehículo, tipo turismo cuyas características coincidían con las que los alertantes habían indicado en sus llamadas telefónicas, el cual circulaba en sentido contrario al legalmente establecido; es decir, lo hacía sentido Madrid por la calzada con sentido Badajoz.

Provocó un accidente

En su periplo, el ‘kamikaze’ (como lo ha calificado la propia Guardia Civil) provocó un accidente a consecuencia de su conducción temeraria, y con anterioridad a su detección por la Guardia Civil.

Resultó herido el conductor de otro vehículo que circulaba correctamente en sentido Badajoz, se encontró de forma súbita con el vehículo que circulaba en sentido contrario, lo que le llevó a realizar una maniobra evasiva para evitar la colisión frontal, chocando con una bionda metálica de protección situada en un margen de la vía.

El conductor, único ocupante del turismo, salió ileso y solo se registraron daños materiales de escasa consideración en el auto.

Pena de prisión de 6 meses a 2 años

Por estos hechos se instruyeron diligencias por parte del Equipo de Atestados del Destacamento de Tráfico de Trujillo en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción Número 2 de la localidad, por las que se investigó al conductor kamikaze.

Al detenido de 79 años se le investiga por la comisión de un presunto delito de conducción temeraria recogido en el artículo 380 del Código Penal, enfrentándose ahora a una pena de prisión de 6 meses a 2 años y a la privación de conducir un vehículo a motor de 1 a 6 años.

Además, por parte de los agentes, se propuso la apertura de un expediente de pérdida de condiciones psicofísicas para la conducción de vehículos al detenido.