Un grupo de jóvenes placentinos aprovechando el carnaval, el sábado por la noche, realizaron una parodia de actual momento convulso que sufre el consistorio de la ciudad, y se disfrazaron y caracterizaron de varios de los políticos imputados en diversas causas. Y sin ningún tipo de vergüenza, se echaron a la calle con pancartas, tambores y silbatos para hacerse oír.

La acogida fue espectacular y sorprendente, ya que despertaban una sonrisa entre todos y cada uno de los ciudadanos que se los encontraban. Otros muchos, incluso iban más allá, y se unían a sus cánticos y bailes.

Dichos personajes, recorrieron las calles de Plasencia, hasta bien entrada la madrugada del domingo, recobrando así el ya tiempo atrás perdido carnaval de esta ciudad.