Es la primera vez que he escrito con libertad compositiva, dejándome llevar", afirma Luis Landero. La nueva novela del escritor extremeño, Retrato de un hombre inmaduro , sale a la venta hoy en las librerías españolas, en la misma editorial que lo descubrió hace 20 años, cuando publicó Juegos de la edad tardía , una de las irrupciones literarias más destacadas de este periodo.
La sexta novela de Landero (Alburquerque, 1948) está protagonizada por un enfermo, ingresado en un hospital, donde cuenta algunos pasajes importantes de su vida, a modo de balance, a su compañera de habitación. Un monólogo tragicómico a cargo de un hombre que es a la vez ejemplar y capaz de las mayores bajezas.
"Los ocho meses que le he dedicado (a esta novela) han sido de felicidad", reconoce el escritor extremeño, afincado en Madrid. Landero reconoce que la novela contiene muchas connotaciones autobiográficas."¿De dónde va a sacar uno las cosas si no? Todo lo que cuenta la novela está sacado de personajes del barrio madrileño de Chamberí, pero a la vez está fantaseado", señala el autor sobre una obra de la que se siente muy satisfecho al no contar con un esquema cerrado previo.
Luis Landero apareció en el panorama literario español hace ahora 20 años con la publicación de Juegos de la edad tardía (1989), con la que recibió el Premio Nacional y de la Crítica. Posteriormente llegaron Caballeros de fortuna (1994) publicada como el resto en Tusquets, El mágico aprendiz (1998), El guitarrista (2002), y Hoy, Júpiter (2007). Además de sus seis novelas, tiene publicado un ensayo Entre líneas: el cuento o la vida (2000) en Libros del Oeste.
Luis Landero nació en el seno de una familia de campesinos que emigró a Madrid en 1960. Para costearse los estudios de bachillerato y después de filología hispánica ejerció los más diversos oficios, guitarrista flamenco, acomodador, linier, oteador, entre otros. Fue profesor ayudante en la sección de filología francesa de la Universidad Complutense de Madrid y profesor de lengua y literatura españolas en un instituto de bachillerato. Hasta su jubilación hace dos años, enseña literatura en la Escuela de Arte Dramático de Madrid.
