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REPORTAJE

El éxito de dos historias de verano

Joshua Asselin, Juanmi Morales. Dos nombres propios y un éxito, el del Cáceres, en un inicio de temporada mucho mejor al previsto. Las exhibiciones del pívot y del escolta están siendo uno de los ejes principales del positivo arranque.

Pero ambos tienen una intrahistoria muy particular y están en el Cáceres por puro empeño personal. En el caso del americano, su fichaje, el último que se hizo, estuvo a punto de frustrarse por una lesión congénita en la rodilla derecha.

"No nos podemos equivocar", insistía el presidente verdinegro, Felipe Fernández, cuando, con el propio entrenador, Ñete Bohigas, buscaban el sustituto del mítico checo Jiri Okac. Era el último fichaje y la negociación fue rápida. Pero en el reconocimiento médico se le apreció la dolencia, conocida científicamente como la osewood slater , según la cual los huesos crecen más que los cartílagos, una enfermedad propia de personas muy altas.

En el primer amistoso, en Garrovillas ante el Algeciras, Asselin cojeaba ostensiblemente. Y con ello las dudas se acrecentaron. Cuentan en el club que el presidente apenas pudo pegar ojo pensando qué hacer.

Y llegó una solución casi inesperada. El Cáceres quería curarse en salud y renegoció con su agente el contrato. Hubo acuerdo, entre otras cosas porque el propio baloncestista así lo quiso y aceptó las condiciones que pedían los extremeños. El pívot se comprometía a no cobrar si su lesión se agravaba y no podía jugar, pero al mismo tiempo se ponía en manos de los médicos, Marcos Maynar y el traumatólogo consultor, Alfredo Lucas, que desde entonces dirigen un tratamiento específico que está dando unos resultados excepcionales: el pívot ha ido de menos a más y es el más determinante de la LEB.

Nuevo ídolo

Pero Asselin ya no cojea y es, sin duda, el jugador revelación de la LEB. Hacía años, desde la marcha de José Antonio Paraíso al Pamesa, que la afición cacereña no tenía un referente claro. Ahora sí con el de Michigan. "Mira, mira, es Asselin, ése que mete tantos puntos y coge tantos rebotes", decía un niño a sus amigos en una tienda cercana al multiusos el fin de semana. Asselin vive en el Nuevo Cáceres con su novia y, dicen de él, tiene un carácter extrovertido. "Es como un nacional, aunque con clase de gran americano", asegura el gerente del Cáceres, Julio Espino.

Asselin tiene un contrato garantizado y no puede ser fichado por otro club durante la temporada --tampoco tiene cláusula de rescisión--, aunque si se lesiona podrá ser sustituido sin coste adicional alguno.

El caso de Juanmi Morales es radicalmente distinto, aunque igualmente beneficioso para el club y para el propio jugador. Durante más de un mes estuvo en entredicho que volviera a fichar. Sin embargo, el escolta canario siempre insistía, ya desde el inicio del verano: "Quiero quedarme por el entrenador", manifestaba.

Antecedentes

Morales estuvo con Bohigas en el Plasencia. Y con él fue máximo anotador de la LEB-2 (17 puntos de media). El año pasado, su participación fue irregular y perdió la titularidad.

En éste, está claro que ha renacido. Si dudó en renovar fue porque el club le ofrecía una rebaja considerable en su contrato. Ahora ya no es de la clase alta de la plantilla a la hora de cobrar. Bastante por encima de él están los dos americanos, Dani López y Ramón Moya. Pero Morales quiere volver a ser el que era. De momento, está acallando a sus críticos y siendo un jugador decisivo.

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