El Juzgado de lo Social número 13 ha desestimado la demanda interpuesta por el jugador David Albelda contra el Valencia para la rescisión de su contrato, según han informado fuentes jurídicas. El titular del citado juzgado cree que no existen "graves incumplimientos" por parte del club que constituyan una "causa justa" para que el jugador pueda solicitar la extinción de su contrato.

Entre otros argumentos, la sentencia subraya que el club no le ha quitado al jugador la licencia de la Federación Española de Fútbol para ser alineado en competiciones oficiales, lo que para el magistrado significa que Albelda conserva su oportunidad de disputar encuentros.

Según argumenta el juez, la decisión de que no volviera a jugar fue del entrenador del equipo, el holandés Ronald Koeman, pero esta determinación no fue confirmada por el presidente del club levantino, Juan Soler, que es quien tiene "el poder de dirección empresarial y la última palabra" al respecto.

PROFESIONALIDAD Además, el entrenador tiene "el mismo" carácter de "deportista profesional" que el futbolista, y entre sus competencias "no figuran las de no convocar indefinidamente a un jugador", sino, únicamente, "la confección de la lista de convocados para los partidos, así como la designación de los que deben alinearse". Por tanto, "no puede interpretarse" que la decisión vulnere el derecho del jugador a la "ocupación efectiva".

El magistrado dice que en el fútbol no hay "verdades o decisiones eternas", ya que "lo que hoy es blanco mañana es negro, para volver a ser blanco días o semanas después, cuando las cosas cambien por el sólo hecho de que el balón entra, caprichosamente en muchos casos, en la portería propia o la contraria".

En este sentido recuerda que existen "incontables casos" de futbolistas que no cuentan, pero que después se han convertido en "indispensables y decisivos", como les ocurrió a Helguera y a Beckham en el Madrid con Fabio Capello la temporada pasada.