Fausto Moreno (Mérida, 9-8-1966) es el actual seleccionador nacional de piragüismo, el equivalente a lo que son Luis Enrique en fútbol o Sergio Scariolo en baloncesto. El confinamiento le pilló en Sevilla, aunque también conserva un domicilio en su ciudad natal. Nadie mejor que él para charlar de cómo ha impactado la crisis del covid-19 en su deporte y en concreto en dos de los máximos exponentes extremeños, Estefanía Fernández y el paralímpico José Antonio Valle.

-Era evidente que los Juegos Olímpicos tenían que aplazarse. ¿Cómo afectará eso al equipo nacional?

-Estamos esperando todavía para poder hacer concentraciones. No es un deporte fácil de simular con un ergómetro, que suelen ser muy duros. Además, un factor principal del piragüismo es el agua, el equilibrio, y eso desde luego que no se puede recrear con una máquina. Necesitamos salir a entrenar y estamos esperando a que nos permitan lo antes posible. Cada uno tiene su espacio en casa y mucho no se puede hacer en ocasiones.

-¿Cuál es la perspectiva que queda para 2021?

-Se presenta una temporada muy atípica. Estamos intentando hacer el máximo de competiciones posible, porque las de esta están canceladas o muy pendientes de un hilo, como los Mundiales. Queremos concentrar a los deportistas de nuevo, pero sabemos que por ejemplo que se abran los centros de alto rendimiento a corto plazo va a ser complicado. Hay que buscar soluciones a través de pisos para que los chicos estén entrenando juntos y con continuidad. Todavía no sabemos nada. Lo que sí tenemos claro es que hay que diseñar un calendario nacional fuerte como mínimo.

-En cuanto a los especialistas extremeños, ¿la emeritense Estefanía Fernández tenía sus opciones olímpicas?

-Claro. Como cualquiera de los que están en la élite porque hay muchísimo nivel. Había un clasificatorio a nivel español al que iba a acudir para luego luchar por una plaza a nivel europeo y a nivel mundial. Evidentemente, tuvo que cancelarse. Yo pienso que era un buen año para ella. Estaba en un momento de forma muy bueno y teníamos muchas esperanzas puestas en ella. Ahora todo se ha trucado y hay que esperar unos meses.

-José Antonio Valle también depende de su federación y tenía un puesto asegurado en los Juegos Paralímpicos o al menos eso es lo que se anunció…

-Lo tenía fácil. No hay ningún competidor a su altura porque está marcando las diferencias. Había conseguido su plaza, pero la tenía que poner en juego aún. Pese a ello, estaba claro que la iba a lograr sí o sí, porque no se la jugaba a una sola prueba, sino que, si te ganan en un mal día, tienen reválidas. Su sensación era muy clara.

-¿Irá en 2021?

-Pienso que sí. Tiene ya una edad, pero esta situación puede favorecerle incluso. Si los Juegos hubiesen sido en Tokio este año quizás se hubiese retirado después, pero si se mete en otro ciclo paralímpico puede ser un empujoncito para afrontar el de llegar hasta 2024.