Es máxima la necesidad del Alter Enersun Al-Qázeres, pero también es máxima la dificultad de sacar algo positivo de la visita este domingo del líder de la Liga Femenina Endesa, el Spar Girona, al pabellón Multiusos de Cáceres (18.00 horas). Se le acaban las opciones de luchar por la permanencia al conjunto extremeño, que al menos este sábado recibió la ‘buena noticia’ de la derrota del Bembibre, que cedió en cancha del Araski (72-54). No sucedió lo mismo con el Campus Promete, que se impuso 78-72 al Durán Maquinaria Ensino, un triunfo que prácticamente le libra de la pelea por la supervivencia en la categoría.

Con el Quesos El Pastor de Zamora ya descendido, la otra plaza se le juegan entre Al-Qázeres y Bembibre, con ventaja para el cuadro leones: una victoria más, el average y, quizás, un calendario más benévolo.

A la cita contra el Girona llega el Al-Qázeres al menos con las buenas sensaciones del partido ante el Estudiantes del miércoles, donde plantó cara a otro de los equipos de arriba, aunque sin obtener frutos. Lograrlos este domingo sería un auténtico milagro.

«Nuestra preocupación y nuestras fuerzas están en agarrarnos a las opciones que tenemos, que pasan porque nuestros rivales no sumen», decía el técnico Jacinto Carbajal el viernes. No ha sumado el Bembibre, sí el Promete. Y si todo se quede así, el Al-Qázeres debe ganar al menos dos de los cuatro partidos que le quedan: Girona, Ensino (12 de marzo), Promete (20) y Cadí La Seu (27).

«Intentamos transmitir que hasta que nuestros rivales inmediatos no sumen un partido, tenemos opciones. En eso estamos centradas, en hacer bien nuestro trabajo, en competir y un poco en esperar resultados, que es lo que va a marcar el final de temporada», añadió Carbajal.

Recupera el técnico para este partido ante el Girona a Petra Zaplatova y Anna Pachurina, que no pudieron jugar ante el Estudiantes al no estar inscritas en el momento del aplazamiento del partido. Más opciones en la rotación, aunque eso no se traduzca en más opciones para sumar la victoria.

«La semana», dice el preparador, «ha estado marcada por el desgaste físico. Hemos podido descansar el jueves y entrenado viernes y sábado para recuperar sensaciones en pista, pero sin mucho desgaste, porque jugamos ante un rival exigente, de los mejores equipos de la competición».

La visita del Girona es el penúltimo partido de la temporada del Al-Qázeres en el Multiusos, un encuentro que volverá a jugarse de nuevo sin público. Cerrará la temporada en casa el 20 de marzo contra el Campus Promete y ahí, si la evolución de la pandemia sigue siendo positiva en Extremadura, lo más probable es que ya sí pueda recibir a su afición. Puede que ya no se juegue nada. O puede que se lo esté jugando todo.