El Cacereño ha vivido los seis últimos meses, prácticamente toda la temporada, en zona de playoff de ascenso a Primera RFEF, pero el discurso en el club verde siempre ha sido el de mantener la permanencia como objetivo. «Cuando consigamos los puntos para salvarnos, nos plantearemos nuevos objetivos», repetían tanto el entrenador, como directivos y jugadores, aunque estos últimos ya empezaban a poner un ‘pero’ a su mensaje. «No nos vamos a engañar», decía el pasado jueves Jorge Barba en este diario, «estamos en segunda posición y vamos a pelear por no salir de esos puestos de arriba en los que llevamos todo el año porque equipo hay». Decía eso antes de sumar los tres puntos ante el Don Benito.
El Cacereño tiene ya 43 puntos y, si bien no supone la permanencia matemática, sí se podría hablar de ella virtualmente. Con 12 jornadas por disputarse (36 puntos en juego), el CPC tiene 18 puntos más que el Xerez Deportivo, el que ahora mismo iría al playoff de permanencia; y 20 más que el Mensajero, el primero de los equipos en descenso, que acompaña en esas plazas al resto de canarios: Las Palmas Atlético, Tamaraceite, Panadería Pulido y San Fernando.
Pero, a pesar de todo, es la prudencia la que sigue dominando. «Vamos a pensar en el corto plazo y a ver hasta dónde nos lleva esto», decía el domingo Julio Cobos, que sí reconocía que virtualmente se puede hablar ya de permanencia. «Si no son 43, serán 44 o 45…, no creo que necesitemos muchos más». Junto a la prudencia («solo pensamos en el próximo partido») incluía un mensaje que incidía en la necesidad de ser ambiciosos. «A todos les gusta estar arriba. Y si llevas todo el año ahí...», apuntaba, sin terminar la frase.
El Cacereño se enfrenta en las tres próximas jornadas a tres rivales de la zona de descenso, tres equipos, todos canarios, que pelean por su supervivencia en la categoría. Este domingo visita al Tamaraceite (13.00 horas), que viene de no jugar contra el Córdoba por positivos covid en su plantilla y que ha ganado sus tres últimos partidos como local (es como visitante cuando sus prestaciones bajan mucho, ya que es el peor de la liga). El domingo 6 de marzo recibirá en el Príncipe Felipe al colista San Fernando (diez jornadas sin ganar en las que solo ha sumado cuatro puntos y cuatro goles a favor), un duelo que será en un horario poco habitual: las 11.00 de la mañana. Y cerrará este ciclo visitando el 13 de marzo al Mensajero, un equipo que ha mejorado sus prestaciones en el último mes.
Yael-Barba, una pareja habitual
Yael y Jorge Barba pueden jugar juntos. Lo defendió Cobos el domingo cuando ninguno de los dos hizo un buen partido. Tampoco acabaron de funcionar en el anterior envite en el que coincidieron, contra el Cádiz B. «Ha habido otros [partidos] en los que se ha jugado muy bien al fútbol y hemos salido contentos estando los dos», apostillaba el técnico, que juntos los ha alineado de inicio en 12 de las 22 jornadas disputadas. Eso sí, fue más habitual en la primera parte de la temporada.
De las doce veces que han jugado juntos, ocho han sido en el Príncipe Felipe, donde su mayor amplitud permite aprovechar mejor su gran calidad. Pero no fue así el domingo, cuando la ‘caraja’ fue generalizada. «No hemos sabido entender el partido», dijo Cobos, autocrítico a pesar de la victoria ante el Don Benito (2-0).
También reconocía el preparador que su equipo podía ser más competitivo con alguien junto a Kamal (Bermu o Javi López), aunque se defendía afirmando que «somos un equipo competitivo de todas las maneras».
