0 - Montijo: Sergio Tienza; Chechu, Molina, Gabri, Razvan; Rodao, Calin (José Ángel, minuto 67), Barragán, Samu Manchón, Joel (Santi Hoyos, minuto 67) y Dani Segovia.

1 - San Roque de Lepe: Robador; Iván Robles, Ávila, Carmona, Marrufo, Joel, Vergé (Camachito, minuto 69), Adrián; Charaf, Nané (Cunha, minuto 69) y Chuma (Pola, minuto 86).

Gol: 0-1: min. 75, Chuma, de penalti.

Árbitro: González Paéz (Colegio Madrileño). En el Montijo, amarillas a Razvan, Joel y Dani Segovia. En el San Roque, a Iván Robles, Fran Ávila, Charaf y Nané.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigesimoquinta jornada del grupo IV de Segunda RFEF disputado en el estadio Emilio Macarro ante unos 700 espectadores.

Segunda derrota frente a sus fieles de un Montijo que gozó de buenos pasajes, pero le faltó ese punto de otras jornadas de anticipación y saques de balón estático que pusiesen en más apuros a un San Roque de Lepe que hizo lo justo y tuvo el santo y la calma de cara para ejecutar los tres puntos de penalti (0-1). 

Enseñando bandera, aunque sin alcanzar la excelencia balompédica ni por asomo, despertó la batalla en el escenario montijano un San Roque que firmó su primer aviso a cuero estático, alejando fantasmas Chechu y puñeteando el saque inmediato desde la bandera Tienza con apenas tres minutos en juego.

El once local ejerció de oyente ante las ínfulas y mejor toque de balón de un rival sin miedos ni dádivas en el descorche. Chuma avisó desde la frontera del área a las nubes y stop en la narración. Todo en la zona más ancha y poco a poco fue quitándose las legañas un Montijo que vio el caudal de espacios que le brindaban los andaluces para meter más intensidad a su juego, aunque sin saludar a un gélido Robador, que conste en esta reflexión narrativa.

Mucho centrocampismo

Rodao botaba desde la bandera la bola pero sin alterar sus biorritmos musculares Robador captaba el balón (min. 17). Un suspiro después Joel se plantaba en el borde del área presto a fusilar, pero apareció letal el tanque Chechu para tapar minas. Avanzó entre dudas, centrocampismo y sin ocasiones dignas de reseña el discurso en el verde. Vergé halló el cielo en un saque de falta (min. 28) y Barragán remató cruzado pasada la media hora en juego.

Todo discurría por los mismos y desangelados horizontes y a dos de sonar la campana del intervalo llegó la mejor noticia y fue por parte ajena. Un pase filtrado de Adri descosía las armaduras rojinegras pero apareció como un tanque el lateral Chechu para enviar el posible remate a un saque desde la bandera que pasó a beneficio estadístico y abrochó la primera entrega.

El único gol, de penalti

Del túnel de vestuarios los jugadores rojinegros sacaron sus rifles y empezaron a disparar al arco de un hasta estas líneas calmado Robador. Un centro medido de Juan Barragán, muy bregador el extremo este domingo, no pudo convertirlo en diana el ariete Dani Segovia (min. 46). Sin respiro, Barragán firmó un fax-chut que paró sin apenas incomodarse Robador. El rojinegro avanzaba camino de las filas rivales siendo Calin el siguiente en disparar pero su envío halló las nubes, no el arco rival (min. 50). Apostaron por balones largos los hombres de las Vegas Bajas ante un San Roque algo más incómodo y lejísimos de asomar a los confines rojinegros. El técnico Marrero provocaba el primer y único movimiento sísmico en su banco, dando vida y verde al ariete Hoyos y al mediocentro José Ángel, para no alterar el 4-4-2 de su pizarra. 

Desprendía mejor sintonía el Montijo, pero las cosas dieron un giro inesperado en un pase de la muerte visitante sobre Camachito que veía el acoso y derribo (amarilla de premio) de Julio Rodao. Al punto letal y la ejecución engañando a Tienza desniveló la balanza con un cuarto de hora (eterno a la postre) por pleitear. El Montijo no bajó los brazos y se fue a por todas, pero sin jugo. Rodao probó a Robador y a dos del gong Razvan buscó la escuadra pero se impuso la envergadura de Robador. El tiempo de prolongación (casi seis minutos), no alteró el estado de las cosas e incluso tuvo Cunha el 0-2. Sonaba la música fúnebre y los tres puntos volaron a tierras leperas. Traspié del Montijo, que aún así se mantiene en la zona de playoff de ascenso a Primera RFEF tras los tropiezos de sus compañeros de pelea, Ceuta (1-0 ante el Cádiz B), Villanovense (2-1 con el San Fernando) y Coria (1-2 frente al Panadería Pulido).

Juan Marrero: «Hoy No hemos acertado en el balón parado»

«El cien por cien lo hemos lanzado mal», se quejaba Juan Marrero, entrenador del Montijo, en referencia a las acciones a balón parado, uno de los puntos fuertes del conjunto rojinegro cuando juega como local. «En trabajo sí hemos sido el equipo de otros domingo, en intensidad defensiva también. Pero cuando renunciamos a las acciones a balón parado, que no hemos lanzado ninguna bien, es complicado». «Nos hemos enfrentado a un equipo que tenía muchas armas ofensivas y creo que hemos mantenido la esperanza del triunfo con esa fortaleza defensiva». No ponía excusas a la derrota el preparador de los rojinegros, ni al penalti, que lo vio claro («sí, lo ha sido»), y fue fruto, como reconoció, de un fallo defensivo. A preguntas de los periodistas, el preparador valenciano se confesaba sorprendido por las pocas ocasiones que tuvo su equipo. «La calidad del golpeo no ha sido la de otras veces, aunque también es mérito de ellos», decía en referencia al San Roque, «que han esperado su ocasión, que ha llegado en un desajuste». Aún así, elogiaba el trabajo de su equipo, explicando que fueron varios los futbolistas que jugaron con algún tipo de molestias. «Nada que objetar al trabajo de mis jugadores, no les puedo pedir más. El corazón de este equipo es muy grande y vamos a seguir son ese halo de esperanza de intentar meternos con los de la parte de arriba». De momento, el Montijo se mantiene en la zona de playoff, es cuarto, a pesar de la derrota. El próximo partido de los montijanos es el sábado, cuando visitan al Xerez Deportivo a partir de las 20.00 horas.