Panrico tiene vía libre para aplicar un ERE temporal que afectará a 793 trabajadores

El sector del pan envasado tiene problemas. Las firmas más importantes del sector han hecho esfuerzos en los últimos años para conquistar al consumidor con frescura, después con variedad y, en los últimos meses, con precio. La dirección de Panrico ha conseguido el permiso del Ministerio de Trabajo para aplicar un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal que afectará a 765 trabajadores de sus fábricas en Santa Perpètua de Mogoda, Paracuellos del Jarama, Sevilla y Murcia, así como a 28 empleados de delegaciones comerciales.

Según la resolución del Ministerio, a la que ha tenido acceso Europa Press, el expediente tiene una duración de 180 días, aunque en las fábricas se aplicará de forma rotatoria mediante una fórmula de reparto de los días de suspensión entre los trabajadores afectados en función del excedente determinado en cada centro de trabajo. El número concreto de afectados es de 272 trabajadores en Santa Perpètua de Mogoda, 213 en Paracuellos del Jarama, 161 en Sevilla y 119 en Murcia. Quedan excluidas del ERE las factorías de Valladolid, Puente Genil (Córdoba) y Santiago de Compostela. Panrico suma una plantilla total de 2.182 trabajadores.

El expediente se enmarca en las medidas de adaptación a las necesidades actuales de producción y de demanda del mercado, según dijeron a Europa Press en fuentes próximas a la compañía, que destacaron que la fijación de turnos rotatorios permitirá que "nunca estén incluidos más de 170 empleados de forma simultánea".

En la resolución de Trabajo consta que el grupo justifica el expediente, entre otros motivos, por la caída de las ventas, que en el 2010 fue del 12%, hasta situar su facturación en 381 millones de euros. Pérdidas En el 2010, el fabricante de Donuts y Bollycao registró unas pérdidas de 225 millones de euros, un 46% por encima de los números rojos de 154 millones del ejercicio precedente, mientras que el resultado de explotación fue negativo en 159 millones.

Según explicaron fuentes financieras, el resultado del 2010 incluye un "fuerte saneamiento" del fondo de comercio y otros activos intangibles --valoración de marcas que venían de la compra de Panrico por el fondo Apax-- por un importe de 155 millones de euros, y la eliminación de créditos fiscales por 22 millones.

Asimismo, recoge gastos asociados a la refinanciación y al cambio de la propiedad en 2010 --cuando Apax cedió el control a la banca acreedora--, a los que se suman "los costes pendientes de amortizar de la reestructuración financiera realizada unos años antes y que se han contabilizado ahora de una sola vez", por 27 millones de euros.

Medidas contra un crisis temporal Excluyendo estos elementos, según las mismas fuentes, el resultado después de impuestos habría sido negativo en casi 40 millones de euros en el 2010 y el resultado de explotación hubiera sido positivo. La resolución de Trabajo destaca que el hecho de no proceder a extinciones de contratos refleja que se trata de una situación coyuntural que se pretende superar con suspensiones temporales, junto con otras medidas, como la decisión de no renovar contratos temporales o la renegociación de la deuda financiera contraída en el 2010.