"Peligro. Bomba". Este mensaje, escrito a mano sobre una cuartilla, se encontraba encima de la bolsa que escondía el artefacto de la banda terrorista ETA que fue desactivado el pasado miércoles en la localidad guipuzcoana de Zarautz. La bomba colocada por ETA, de un kilo de amonal, fue descubierta por un vecino de la zona.

En el mismo municipio, en mayo, unos jóvenes propinaron una patada a una caja de caudales, aparentemente abandonada y que contenía dos kilos de cloratita, sin que hubiera heridos. Además, en la madrugada de ayer, varios desconocidos lanzaron un artefacto contra una sede socialista de Bilbao y pintura contra otra. A. G.