Mientras Batasuna pide insistentemente ser un interlocutor político más, la justicia le recuerda que, de momento, sigue ilegalizada. El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska citó ayer como imputados a Arnaldo Otegi y a otros siete miembros de la mesa nacional de Batasuna por convocar un acto de presentación de este órgano, el 24 de marzo, en Pamplona, cuando la actividad de este partido fue suspendida.

Fue el fiscal Juan Moral el que solicitó la citación basándose en los informes de las fuerzas de seguridad. Moral pidió la comparecencia solo de los dirigentes procesados en la causa abierta contra la fuerza aberzale. Así, el juez acordó citar el 30 y el 31 de mayo a Otegi, Jon Gorrotxategi, Karmelo Landa, Rufino Etxebarria, Juan Cruz Aldasoro, Pernando Barrena, Joseba Permach y Joseba Alvarez.

El mismo día en que entró en vigor el alto el fuego, Batasuna celebró un acto de presentación en Pamplona. Otegi no participó porque tenía neumonía, pero el juez le ha citado porque los documentos indican que es miembro de la mesa nacional.

El portavoz de Batasuna aseguró que la citación y otros "ataques" que a su juicio sufre la izquierda aberzale desde la declaración de alto el fuego han situado el proceso de paz en "extrema gravedad". Otegi dijo que "si no acaban las agresiones las cosas serán mucho más difíciles", hasta el punto de comprometer el proceso.