Ni las mismas asociaciones de guardias civiles esperaban ayer que un juez les autorizara celebrar el sábado la manifestación que la Delegación del Gobierno les había prohibido por su "inequívoco carácter sindical". Les pilló tan por sorpresa que, anoche, la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) y la Unión de Oficiales (UO) decidieron mantener el acto alternativo de paella y concierto en unas carpas de la localidad de Rivas Vaciamadrid, pero antes se manifestarán por las calles de Madrid para reivindicar su equiparación laboral con el Cuerpo Nacional de Policía (CNP).

Si a las asociaciones la sentencia les pilló por sorpresa, un jarro de agua dejó helados a la cúpula del instituto armado y al Ministerio del Interior. En las últimas semanas, destacados mandos de la Guardia Civil han manifestado al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, su "gran preocupación" por las actitudes y reivindicaciones de unas asociaciones que, a su juicio, están ejerciendo un "rol sindical" que la ley no les permite.

Rubalcaba comparte esa "preocupación" y el martes atendió a las peticiones de algunos generales, lanzando varios mensajes en su discurso de apertura del curso de oficiales de la Guardia Civil, en Aranjuez. Allí, recordó que el modelo policial "es y será" el actual, con una fuerza civil, el CNP, y otra militar, la Guardia Civil. Sin voluntad de cambio. Aquí radica la "preocupación" de algunos mandos, que sospechan que las reivindicaciones de las asociaciones persiguen, en realidad, "restar carácter militar" a la Guardia Civil para forzar una fusión con el CNP.

La reciente huelga de bolígrafos caídos de los agentes de tráfico ha causado una caída en picado de las multas y ha ocasionado una gran crisis en el seno del instituto armado, que ha visto cómo, por primera vez, los guardias desatendían su prohibición expresa a la huelga.

14 DIAS LIBRES El director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, presentó precisamente ayer la nueva normativa sobre la jornada laboral del instituto armado. Una orden general que contempla mejoras, pero que siguen rechazando las asociaciones del instituto armado. Entre las mejoras está la concesión de 14 días libres en compensación de los festivos trabajados. Además, el descanso semanal se ampliará de 36 a 48 horas consecutivas. Con la nueva normativa, los horarios partidos tendrán "carácter excepcional".