El sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Extremadura (STE-Ex) condenó ayer la agresión a dos profesores del colegio Campo Arañuelo y mostró su solidaridad "con los compañeros agredidos y con el resto de la comunidad educativa del centro". El sindicato alertó de nuevo sobre "la situación de vulnerabilidad del profesorado" y calificó de "intolerable" que se sigan produciendo estos hechos.

La Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT también mostró su repulsa ante los "graves hechos" ocurridos y que "atentan contra la convivencia en el centro y la integridad física del profesorado", y pidió a la Consejería de Educación que ponga en marcha las medidas de protección y asistencia jurídica a los profesores "al considerarse estos hechos como un delito a un funcionario público en el ejercicio de su labor profesional".