Desde la Federación de la Enseñanza de CCOO Extremadura creen que junio es la opción menos mala. Según explica Antonio Serrano, no hay ningún sistema que garantice el éxito, aunque opina que septiembre la peor solución: "Porque durante el verano la formación no depende del sistema, sino de los recursos familiares".

En este sentido, el responsable de acción sindical y política educativa de este sindicato señala que hay estudiantes que no pueden permitirse clases particulares durante los meses estivales. Y la diferencia no es solo económica: "Hay chicos que estudian en pueblos donde o no hay profesores particulares o no hay recursos para que puedan desplazarse para recibir esa formación". Serrano recuerda que "la ley dice que es la Administración la que debe garantizar el derecho de formación igual para todos y eso no es posible en la convocatoria de septiembre. Los recursos los tiene que poner el sistema".

Eso sí, tampoco comparte la decisión de crear clases de apoyo en horario de tarde: "Es un parche, porque son insuficientes. No basta con hacerlo de abril a junio; deben ser durante todo el curso, como en Finlandia, que es el sistema con mejores resultados".