La empresa Siderúrgica Balboa, una de las más importantes de la región, se ha visto afectada por la crisis económica, especialmente además por su relación con el sector de la construcción, y en los últimos cinco años sus empleados han tenido que afrontar cuatro Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).

El primero se registró en 2009 y fue de carácter suspensivo. Afectó a 210 trabajadores que dejaron de trabajar durante un año.

En mayo de 2010, la empresa presentó el primer ERE suspensivo, en el que inicialmente planteó 237 despidos que luego se quedaron en 150, de acuerdo con la limitación de la Junta. En diciembre, la empresa presentó un nuevo expediente para 63 trabajadores, que la administración autorizó.

La empresa también se vio afectada por el ERE presentado en 2012 en el Grupo Gallardo, en el que le correspondieron medio centenar de despidos.