El Consejo de Gobierno de Extremadura aprobó ayer el decreto de la convocatoria de becas complementarias universitarias por un millón de euros, que se destinarán a los alumnos que no alcancen la media de 6,5 impuesta por el Gobierno central para acceder a este tipo de ayudas. La vicepresidenta, Cristina Teniente, recordó que esta medida ya había sido anunciada por el Ejecutivo extremeño y aseguró que se "modifica el criterio del Ministerio de Educación" para lograr que "el acceso a la universidad sea viable para todo el alumnado".

Teniente recordó que hasta ahora las becas regionales compensaban a "quienes se quedaban fuera de la convocatoria estatal por motivos de renta", mientras que ahora van dirigidas "al alumnado excluido por motivos académicos" y que afectarán a estudiantes con medias de entre 5,5 y 6,49. Al respecto, consideró que especialmente importante en una región como la extremeña, con un alto nivel de dispersión geográfica y en la que muchos alumnos deben desplazarse a los núcleos urbanos donde están los campus universitarios para estudiar.