Han pensado algún nombre? ¿Por qué no Giner de Los Ríos?" Esa fue la pregunta que formuló la entonces secretaria general de Educación en Madrid, Martina Cases, a los tres miembros de la Cooperativa Extremeña de Enseñanza Luz que viajaron a la capital en 1994 para solicitar los permisos de apertura de un nuevo centro educativo en la barriada cacereña de Los Fratres.

En el año 1988, la congregación de las Damas Apostólicas del Corazón de Jesús, responsable de la gestión del colegio que las hermanas regentaban en la Casa de los Trucos de la calle General Ezponda, había comunicado al profesorado su intención de abandonar la enseñanza. Ante la posibilidad de perder el empleo, el profesorado decidió organizarse en busca de una alternativa para mantenerlo abierto.

Así nació la Cooperativa de Extremeña de Enseñanza Luz, una organización que, a pesar de ser laica, mantuvo en su nombre las raíces religiosas del centro en honor de la fundadora de la congregación de las Damas Apostólicas, Luz Rodríguez-Casanova.

TRASLADO Una vez constituidos en cooperativa, las monjas cedieron la titularidad del centro escolar para que los socios siguieran desempeñando la actividad educativa que dejaban libre las hermanas. Los profesores se percataron de las necesidades y deficiencias que tenía el edificio de la calle General Ezponda y sus inconvenientes para adaptarse a la nueva normativa educativa vigente, debido a la imposibilidad de reformar la infraestructura de un Bien de Interés Cultural como la Casa de los Trucos. La decisión que se tomó fue trasladar el centro educativo.

Era necesario buscar un lugar. Fue el que sería director durante los primeros veinte años, Jesús López, quien propuso que se ubicase en la parcela que ahora ocupa el Palacio de Congresos.