La Asociación por el Mundo Salvaje (AMUS) utilizará perros para rastrear aves afectadas por tendidos eléctricos, un iniciativa única en España. Esta experiencia está dentro de un proyecto que se desarrollará con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Fundación Biodiversidad, y pretende cuantificar el efecto de la red eléctrica sobre la avifauna, según informa la asociación en una nota.

Si esta experiencia funciona, el objetivo es validar el modelo para extrapolarlo a otras regiones geográficas, ya que en el proceso se espera salvar a muchas aves. Ya existen experiencias similares en parques eólicos en el rastreo de fauna (turones, lobos, osos o nutrias), pero no en buscar aves en general electrocutadas con este método. Mediante el uso innovador de una unidad canina especializada en el rastreo de aves se pretende rescatar un mayor número de ejemplares afectados y ayudar a valorar la peligrosidad de cada tendido, al mejorar la detección gracias al olfato de los perros.

Se estima que solo un 10% de las aves accidentadas en tendidos eléctricos (por colisión o electrocución) son localizadas y muchas de ellas mueren; otras sufren graves lesiones que las impiden volar.