Entrevista | Cuca Gamarra Diputada y secretaria general del Partido Popular

«El gobierno de Sánchez no es un gobierno, sino una cooperativa de políticos»

Cuca Gamarra (Logroño, 23 de diciembre de 1974) acompañó a la candidata cacereña Elena Nevado en el inicio de la campaña de las elecciones al Parlamento europeo. De hecho, en la noche del pasado jueves al viernes, brocha en mano, cumplió con la tradicional pegada de carteles. La diputada anima a los extremeños a acudir a las urnas el próximo 9 de junio porque «Extremadura, el campo extremeño, la economía extremeña se juegan mucho»

Entrevista a Cuca Gamarra.

Jorge Valiente

Almudena Villar Novillo

Almudena Villar Novillo

Arranca la campaña electoral, ¿qué expectativas tiene el PP?

Las expectativas es que el Partido Popular gane estas elecciones el próximo 9 de junio. Pero, sobre todas, es que el voto al Partido Popular sea ese voto decisivo, que garantice que con un Partido Popular fuerte en Europa ayudemos a los agricultores extremeños, a los sectores de la economía extremeña que necesitan de las políticas europeas. El campo necesita protección y nosotros lo que queremos, con el voto de los extremeños, es protegerlo . Queremos también impulsar un modelo de energía que permita que la Central Nuclear de Almaraz permanezca abierta. En definitiva, queremos tener un resultado posible contando con la confianza de los extremeños para defender los intereses de Extremadura en Europa, porque Extremadura se juega mucho en cómo sean las políticas europeas

¿Estas elecciones interesan e implican a la ciudadanía? 

Sí, claro que lo están y van a estar muy implicados. Yo les pido que se movilicen, que participen porque este voto del 9 de junio es un voto en defensa de la igualdad de todos los españoles. Por eso, el voto del 9 de junio es la respuesta para defender que en España todos somos iguales y que los extremeños no son ciudadanos de segunda.                            

¿Estas elecciones del 9-J son un nuevo plebiscito para Pedro Sánchez?

Puede serlo si los españoles queremos. El gobierno de Pedro Sánchez no es un gobierno, sino que un desgobierno. En el fondo, es una cooperativa de políticos que solo buscan repartirse el poder y eso es a costa de la igualdad de los españoles, haciendo que al final los privilegios de unos vayan en perjuicios de otros. Cuando se habla de perjudicados ahí están los extremeños; cuando se habla de romper un tipo de financiación para privilegiar a unas comunidades a costa de otras. 

Dadas estas circunstancias, ¿cree posible el adelanto de las generales?

Sin duda. El 9 de junio puede ser la respuesta a todo lo que estamos viviendo en España. A esta inestabilidad, a esta falta de certidumbre, a entregar la igualdad de todos a cambio del poder. Por tanto, el 9 de junio puede ser la respuesta para decirle a Pedro Sánchez ahí tienes la puerta de salida porque esto no es lo que queremos para nuestro país. Incluso de sus propios votantes, aquellos a los que engañó las pasadas en elecciones generales porque muchos se sienten engañados y tienen la posibilidad de votar al Partido Popular, de decir hasta aquí hemos llegado.

¿La actual crispación solo se vive en España o también se detecta en Europa?

La situación que vive España de polarización y de frustración fomentada y promovida desde el Ejecutivo tiene un origen, unas causas propias del Gobierno de España. Cuando tienes un gobierno y has conseguido una investidura que solo te permite estar en La Moncloa, pero no contar con una mayoría para gobernar España y para tapar la carencia Pedro Sánchez busca la polarización, la polémica constante. Las polémicas que vivimos los últimos días en política exterior se crean para tapar sus problemas en política interior. Evidentemente, esto no es de un gobernante serio, de una persona que merezca estar en el Gobierno de España. Al final con la polarización y la crispación se busca tapar las debilidades de Pedro Sánchez. Y esas debilidades son la corrupción, la falta de apoyos para gobernar. Se lo dijimos desde el principio: usted podrá permanecer en el poder, pero usted no va a poder gobernar España habiendo perdido las elecciones. Y eso es lo que se está evidenciando y que los españoles desconecten de la política española.

Todo ello, ¿pone en peligro la democracia?

Sin duda alguna. La democracia cuesta mucho alcanzarla y en España es muy joven. No debemos olvidar cómo la conseguimos y debemos reivindicar la transición, que engrandeció a la sociedad española. Hay que reivindicar aquella etapa. La amnistía deteriora la democracia porque se entrega a la impunidad, se privilegia una casta. Además, son los propios beneficiados de esa ley los que la están redactando y los que la ponen como condición para que Pedro Sánchez permanezca en el gobierno. A estas alturas a nadie se le escapa que en España el próximo jueves la ley de amnistía se va a aprobar y no para lograr la convivencia en nuestro país, sino porque Sánchez necesita los siete votos para seguir en el poder. Pero el precio no lo paga él, se paga a costa de la igualdad de todos. Y eso claro que deteriora la democracia. La democracia se basa en la igualdad, en la separación de poderes y, cuanto se cuestiona, se va deteriorando. Esto es de máxima gravedad. De hecho Europa se movilizó para frenar muchas de las acciones de Pedro Sánchez y paralizó un intento de reformar el modelo de elección de los jueces, porque suponía una intromisión del Legislativo en el Judicial. Europa se ha pronunciado también sobre la ley de amnistía. Lo ha dicho la Comisión de Venecia. A estas alturas a nadie se le escapa que lo que se está comprando es el poder a cambio de impunidad.

Si llega al Gobierno el PP, ¿qué hará con la ley de amnistía?

El problema es que una vez entra en vigor sus efectos se despliegan, sean los que sean. Hay instrumentos y, en ese sentido, el PP seguirá denunciando en Europa. De ahí la importancia de un partido fuerte en Europa para defender nuestro estado de derecho y para defender la igualdad entre los españoles ante la ley y una España donde no haya privilegios. Hemos dado una batalla desde el punto de vista político durante su tramitación y vetándola en el Senado. Esta ley no cuenta con el respaldo mayoritario de la sociedad española, ni el respaldo político necesario. Hemos dado la batalla social y habrá una nueva cita en la puerta de Alcalá de Madrid para que se sumen los españoles que no quieren estar callados, que no quiere estar quieto y a los que el gobierno de Sánchez desea anestesiar y adormilar. Ha habido grandes concentraciones para decir en mi nombre no, por aquí no pasamos. Ahora están las urnas, que es la respuesta individual porque el jueves votamos los políticos, pero el 9 de junio los ciudadanos deciden.  

¿Pedro Sánchez le debe a la ciudadanía una explicación sobre lo que ocurre con Begoña Gómez?

Pedro Sánchez le debe muchas explicaciones a la ciudadanía. En primer lugar, por las grandes mentiras. Le gusta mucho hablar de bulos, pero es un político que su currículum está lleno de bulos, uno tras otro. Cuando dijo que no pactaría ni gobernaría con Podemos y lo hizo; cuando anunció que tampoco lo haría con Bildu y dio la alcaldía de Pamplona; dijo que nunca habría amnistía y está a punto de hacerlo. Debe muchas explicaciones con la trama de corrupción y sus ramificaciones. Y lo que no es ético en una democracia es que la pareja del presidente del gobierno tenga intereses en actuaciones en las que está implicado el Gobierno de España.

Y con la comparecencia de Sánchez en la comisión Koldo, ¿qué se espera?

Que todas aquellas respuestas que Pedro Sánchez no ha dado hasta ahora, las tenga que dar. Porque los españoles merecen una explicación y porque, por muchos juegos de artificio, por muchas cortinas de humo, por muchas crisis de política exterior que genere para tapar toda su corrupción, no lo va a conseguir; y, por tanto, más pronto que tarde se sabrá toda la verdad. En política es una cuestión de tiempo. Y por mucha huida hacia delante que ha emprendido, al final sabremos todas las ramificaciones de corrupción que hay en su gobierno, en su partido y en su entorno.