Las investigaciones sobre el complot empezaron tras los atentados del metro de Londres, el 7 de julio del 2005, informó ayer The Washington Post . La cincuentena de sospechosos estaban bajo estrecha vigilancia, cambiaban frecuentemente sus planes y preparaban un ensayo en los próximos días. "La naturaleza de la amenaza acabó siendo evidente en el curso de las últimas semanas", dijo una fuente estadounidense.