Los serbios desatan la peor olade violencia del nuevo Kosovo

Grupos de serbios opuestos a la independencia de Kosovo se enfrentaron ayer a las fuerzas de la OTAN y a la policía de las Naciones Unidas en la ciudad de Mitrovica, en el norte del naciente Estado balcánico, en el peor brote de violencia desde la proclamación de la independencia del territorio hace un mes.

Al menos 70 civiles serbios, 27 policías de la ONU y 12 soldados de la OTAN resultaron heridos. Los enfrentamientos se produjeron cuando las fuerzas de la ONU y la OTAN detuvieron a los serbios que ocupaban desde el viernes la sede de los tribunales de la administración internacional, donde trabajaban hasta que se quedaron sin empleo.

Cuando la policía de la ONU se llevaba detenidos a los 35 exempleados serbios, grupos de manifestantes comenzaron a atacar a la policía internacional y a las unidades de la OTAN que la protegían. Durante los violentos enfrentamientos se produjeron disparos en ambos bandos. Las fuerzas de la OTAN aseguraron que dispararon al aire al verse atacadas. La tensión seguía viva anoche en Mitrovica, la ciudad fracturada que simboliza la división del nuevo Estado.

La Unión Europea (UE), la OTAN y la ONU condenaron la violencia, instaron a la población a mantener la calma y reclamaron a los dirigentes serbios y kosovares que se abstengan de cualquier acción que pueda inflamar los ánimos.

BELGRADO Haciendo oídos sordos a las peticiones de la comunidad internacional, el primer ministro serbio en funciones, Vojislav Kostunica, acusó a la OTAN de "aplicar una política de fuerza contra los serbios". Kostunica anunció que está trabajando con Rusia para adoptar medidas conjuntas para "impedir cualquier violencia contra los serbios de Kosovo". Estas declaraciones se interpretaron como una maniobra de Belgrado para lograr introducir tropas de pacificación rusas en la zona norte de Kosovo, de población serbia.