A pesar de las promesas del presidente ruso, Dmitri Medvédev, Rusia no inició ayer la retirada de sus tropas de Georgia. Es más, el presidente ruso prometió "una respuesta demoledora" a cualquier intento de "agresión georgiana". Las autoridades georgianas acusaron a Rusia de avanzar hacia Tiflis. Además, un responsable del Pentágono confirmó que Rusia ha instalado varios misiles de corto alcance SS-21 en Osetia, que podrían alcanzar Tiflis. El Estado Mayor ruso desmintió la información.

Por otra parte, la Cruz Roja denunció ayer que la ayuda no puede entrar en Osetia del Sur por las dificultades puestas por Rusia. Según la ONU, el número de desplazados se acerca a los 160.000.