"Necesitamos que nos guíen las mejores mentes de América", dijo ayer Barack Obama al presentar a su equipo económico. Ya sea porque estamos en crisis, ya sea porque a Obama aún no se le ha acabado la luna de miel, lo cierto es que los nombramientos del presidente electo han recibido muy pocas censuras y sí elogios. Puede que no sean las mejores mentes de un país tan capaz como EEUU, pero sí son de las más respetadas.

El nuevo secretario del Tesoro, Timothy Geithner, de 47 años, es presidente de la Reserva Federal de Nueva York. Desde ese puesto, Geithner ha amasado un gran conocimiento del funcionamiento de los mercados financieros y ha participado en el diseño del plan de rescate bancario del actual secretario del Tesoro, Henry Paulson. La voz de Geithner tuvo mucho peso en las decisiones de salvar con dinero público Bear Stearns y la aseguradora AIG, pero también en la decisión de dejar caer en la bancarrota a Lehman Brothers, lo que ahora se ve como un error. Geithner aporta el suficiente conocimiento de los mercados financieros para continuar el trabajo iniciado por la Administración de Bush. Geithner estuvo en el meollo este fin de semana del proceso que ha acabado con la entrada del Estado en Citigroup.

BUEN NEGOCIADOR Geithner, considerado un muy buen negociador, se formó en las filas de la Administración de Clinton con el que entonces se consideró su mentor y que ahora será otra pieza vital del equipo económico del nuevo presidente: Lawrence Summers. Secretario del Tesoro con Bill Clinton (1993-2001) y expresidente de la Universidad de Harvard, Summers es un defensor del plan de estímulo de la economía que Obama ha convertido en su prioridad a corto plazo.

La pasión con que defiende sus posturas Summers (de 53 años) es uno de sus problemas. Pero no hay duda de que se trata de uno de los pesos pesados de la economía en EEUU, hijo de dos economistas y sobrino de dos premios Nobel de la especialidad. Que haga equipo con Geithner, que fue su vicesecretario cuando estuvo al frente del Tesoro, da garantías de que sabrán trabajar juntos.

El tercer gran nombre del equipo de Obama procede del ámbito académico. Es Christina Romer (49 años), prestigiosa economista de la Universidad de Berkeley. No es casualidad que Romer sea una especialista en la Gran Depresión en estos tiempos que corren. Tendrá temas de los que hablar con Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal, cuyo mandato acaba en enero del 2010. Por Washington ya se rumorea que Summers será su relevo.