Tras años de vigilancia, las autoridades de Hamburgo decidieron cerrar ayer la mezquita Taiba, antes conocida como Al-Quds, situada en el barrio de San Jorge y a la que acudieron a menudo algunos de los autores de los atentados del 11-S en Nueva York y Washington. El delegado de Interior de la ciudad-estado, Christop Alhaus, aseguró ante los medios de comunicación que el centro había seguido funcionando como lugar de encuentro de radicales islámicos: "La mezquita ha servido durante años de centro de atracción de yihadistas , y eso es algo que no podemos permitir sobre suelo alemán".

Según explicó Alhaus, algunos grupos radicales habrían utilizado la mezquita y el centro cultural con el que compartía instalaciones --y que también fue clausurado-- para reclutar yihadistas que luego eran enviados a campos de entrenamiento en Afganistán y Pakistán.

La mezquita volvió a los titulares de la prensa alemana en marzo del 2009, cuando se interceptó a un grupo vinculado al templo que se dirigía a iniciar el entrenamiento para la guerra santa en uno de estos campos.

VIDEO DE PROPAGANDA El diario Bild aseguraba ayer en su edición on line que, de aquel grupo de 11 hombres, al menos uno logró llegar y unirse a un grupo terrorista, como demostraría un vídeo de propaganda que se descubrió con posterioridad.

La redada comenzó a las 6 de la mañana, en la mezquita y en el centro cultural árabe, situado en el mismo edificio. Participaron unos 20 policías uniformados y varios vestidos de civil. "Los agentes han registrado la mezquita en busca de pruebas y se han incautado de ordenadores y material informático", aseguraba ayer el portavoz de Interior, Ralf Kunz, que se mostró convencido de que el material confirmará las sospechas de las autoridades de Hamburgo.

"Este centro ha servido durante años para difundir una ideología agresiva y antidemocrática y una interpretación radical de la religión. Aquí se convertía a hombres jóvenes en fanáticos religiosos", insistió Alhaus, que añadió: "Hamburgo no puede convertirse en la cuna de islamistas violentos".

CANDIDATO A LA ALCALDIA El delegado de Interior y futuro candidato a la alcaldía de Hamburgo quiso dejar claro que la decisión de las autoridades no va en ningún caso contra la gran comunidad musulmana, mayoritariamente pacífica, que reside en la ciudad alemana.

En el mismo sentido se manifestó el portavoz de la oficina para la protección de la Constitución en Hamburgo, Manfred Murck, que aseguró que el cierre de la mezquita de Hamburgo es un "símbolo a nivel nacional" y que debe servir de advertencia a otros grupos radicales. Según Murck, se calcula que actualmente viven en Hamburgo unos 45 yihadistas, de los cuales muchos acudían a la oración de los viernes en la mezquita Taiba, donde llegaban a juntarse entre 200 y 250 personas.

La decisión del cierre es, según comentó Alhaus, una clara señal de que Alemania, que sigue siendo un objetivo de los grupos terroristas islamistas, mantiene su compromiso en la lucha contra el terrorismo yihadista.