El presidente ruso, Dmitri Medvédev, y su primer ministro, Vladímir Putin, apuraron hoy en un acto electoral los últimos compases de la campaña de cara a los comicios parlamentarios del domingo.

El tándem dirigente pidió el voto para el partido oficialista, Rusia Unida (RU), lista encabezada por Medvédev, a la que los sondeos auguran la mayoría absoluta aunque la pérdida de la mayoría constitucional de dos tercios.

Precisamente, hoy se cumple el décimo aniversario de la fundación de RU, formación que fue creada como plataforma electoral para el entonces presidente, Putin, aunque fue en diciembre de 2003 cuando recibió su nombre actual. "Rusia Unida no tiene 150 años, aunque espero que llegue a esa onomástica. Por ahora, tiene una edad infantil, diez años", comentó Medvédev. El presidente ruso subrayó que "RU fue y sigue siendo el partido más importante y popular de Rusia", según informan las agencias locales.

Por su parte, Putin prometió: "Si los electores nos confían la formación del Gobierno, es decir, votan por Rusia Unida y por su servidor en calidad de Presidente (en las elecciones de marzo de 2012), entonces Medvédev encabezará con seguridad el Ejecutivo". "La modernización es la política que debe modificar la conciencia de la sociedad y es el objetivo de todas nuestras decisiones", subrayó Putin.

Según las encuestas, el partido del Kremlin no superará los 300 escaños que conforman la mayoría constitucional en la Duma. Las encuestas sí dan, en cambio, a RU nuevamente la mayoría absoluta, que se obtiene a partir de 226 diputados.

El 96 % de los rusos está convencido de la victoria de Rusia Unida, pero al mismo tiempo más de la mitad cree que las elecciones que "el reparto de escaños será determinado por las autoridades" y que se usarán métodos "sucios".