La saturación actual de los juzgados ubicados en Mérida ha provocado la protesta generalizada de los profesionales de la Justicia. Antes del verano, el colectivo de abogados, procuradores, fiscales y funcionarios llevó a cabo una campaña de recogida de firmas para solicitar al Ministerio de Justicia la creación urgente de un segundo Juzgado de los Penal, y uno de lo Mercantil.

Los trabajadores de los juzgados consideran necesario también la creación del gabinete psicosocial para atender a las víctimas de malos tratos.

El Juzgado de lo Penal de Mérida trata delitos como robos, estafas, agresión con lesiones o conducir en estado de embriaguez, y dicta penas de prisión, multas o de sustitución.