La empresa adjudicataria del tren turístico que recorre la ciudad acaba de adquirir un nuevo vehículo más apropiado para la imagen de una ciudad Patrimonio de la Humanidad y que tiene en el sector turístico a su principal motor económico. La nueva atracción ha supuesto una inversión de 180.000 euros, tiene capacidad para 57 viajeros, uno de ellos con movilidad reducida, y dos plazas más para el personal de la empresa.

Incorpora todo tipo de comodidades para los visitantes que lo utilicen: megafonía, micrófono para el guía, un cerramiento desmontable para adaptarse a las exigencias de la climatología, techo solar, y con todos sus asientos orientados hacia adelante en el sentido de la marcha.

Otra de las novedades con respecto al actual tren es su imagen. El nuevo tren estará completamente decorados con motivos que evocarán a la época romana, incorporará fotos de algunos de los monumentos más representativos de la ciudad, y llevará impresa la imagen de Patrimonio de la Humanidad.

El ayuntamiento había abierto un expediente informativo contra la empresa adjudicataria tras recibir algunas quejas y reclamaciones en las que se aludía a presuntas irregularidades en el funcionamiento de la atracción turística.