Hace cuatro años abrió sus puertas en el número 5 de la calle Virgen del Carmen Las Tacitas, un establecimiento hostelero ubicado en el emblemático barrio de la Antigua que aúna calidad y buen precio para que sus clientes disfruten de los mejores platos sin tener que vaciar el bolsillo. Su propietario es José María Fernández, un empresario de trato cercano y amable que cuida con mimo todo lo que se cuece en la cocina, ya que sus manos son las encargadas de elaborar las recetas de la casa con un sabor casero que hace las delicias del público. Junto a Elena Sosa, camarera multifunciones, han configurado a Las Tacitas como referente culinario de la zona.

La oferta gastronómica incluye una variedad de 8 a 10 tapas como mínimo al día que se caracterizan por ser abundantes con un bajo coste y siempre varían en función de los que José María compre en el mercado. "Estancarse en un listado te obliga a tener lo mismo y así puedo ampliar más la carta", sostiene. Y es que en este bar-cafetería emeritense se puede degustar desde un pestorejo de cerdo o unos garbanzos con callos, hasta unos huevos al plato con chorizo y tomate casero, sin olvidar la buena aceptación que tiene la paleta al horno. Además, disponen de platos combinados a un precio de 4 y 5 euros, así como menús diarios a 8 euros, con primer y segundo plato, bebida, postre y café.

En Las Tacitas también se pueden hacer comidas por encargo, como paella, caldereta o tortilla de patatas, a petición de lo que solicite el cliente. Para los aficionados al fútbol, que pueden acudir a ver a todos los partidos, hay una oferta de un tercio de cerveza por un euro que se prolonga todos los fines de semana. De hecho, la bebida siempre se acompaña de un aperitivo. En cualquier caso, quien quiera degustar la cocina al gusto de José María ya sabe, puede encontrarla todos los días de ocho de la mañana a doce de la noche, salvo los lunes por la tarde que cierra por descanso.