“La Psicología educativa es muy necesaria en los centros educativos”

-La Psicología tiene presencia en ámbitos en los que puede y tiene algo que aportar a la vida de las personas. No tenemos una presencia gratuita o irrelevante ni estamos por estar. Nuestro objetivo principal es favorecer el desarrollo, el bienestar y la salud de las personas en todos los ámbitos en los que los seres humanos estamos presentes e interactuamos. Aunque hay ámbitos en los que nuestra presencia como profesionales no responde a las necesidades reales de la sociedad, por tanto no estamos del todo satisfechos y seguimos trabajando para aumentar el número Psicólogos y Psicólogas en ámbitos como la escuela, donde es imprescindible la presencia de un perfil específico de la psicología educativa; también creo necesario incrementar el número de profesionales de la psicología en los institutos de medicina legal y ciencias forenses para evitar el retraso en la emisión de informes y dar una adecuada respuesta a quienes esperan resoluciones judiciales en las que esos informes son necesarios. Trabajamos para que la psicología tenga la presencia necesaria en programas de intervención social, de atención a personas mayores, de evaluación de la discapacidad, de erradicación de la exclusión social. También instamos a la administración para que se incremente el ratio de psicólogos en atención a la salud mental de la ciudadanía y se iguale al del resto de Europa.

-Recientemente hemos asistido a una polémica social en relación a los mensajes sobre niños y niñas en un autobús, ¿qué puede decir la psicología en torno a este tema?

-La organización profesional de la psicología estará siempre a favor del respeto a la diversidad afectivo-sexual de las personas. Algunas posiciones y manifestaciones traslucen un gran desconocimiento sobre la diversidad que existe en materia de identidad sexual. La presión que reciben las personas cuya orientación afectivo-sexual no es la “supuestamente normativa” es muy alta, llegando a producirse situaciones de discriminación, estigmatización, rechazo y violencia. Cuando esto se traslada a los menores, se está actuando sobre un colectivo altamente vulnerable, y se favorecen comportamientos de discriminación, violencia y rechazo que influyen tanto en su desarrollo como en su salud y bienestar emocional y psicológico.

-¿Está discriminación puede incrementar o favorecer el ‘bullying’ hacia niños y niñas con orientación o identidad sexual distinta a la heterosexual en los centros educativos?

-Uno de los ámbitos en el que con mayor frecuencia se manifiesta la discriminación y el acoso por razones de identidad sexual es el ámbito educativo, este tipo de campañas no harán más que incrementar y justificar actitudes y comportamientos del todo contrarias al respeto y la tolerancia de la diversidad, en esta y en cualquier otra materia. Niños y niñas pasan una gran parte de su tiempo en centros educativos, hemos de procurar que sea un entorno acogedor, en el que cada persona se sienta aceptada y respetada.

-¿Es tarea de la psicología educativa abordar este tipo de situaciones en los centros educativos?

-La presencia de profesionales de la psicología educativa es esencial para el adecuado abordaje de muchas situaciones problemáticas que se dan en los centros educativos. Psicólogos y psicólogas educativos son los profesionales mejor cualificados para detectar, evaluar y elaborar planes de intervención ante situaciones de violencia y acoso, pero también frente a trastornos de conducta, dificultades en el proceso de aprendizaje, alteraciones en el proceso de desarrollo, etcétera.

-Comentaba que hay retrasos en la elaboración de informes psicológicos en los institutos de medicina legal y ciencias forenses, ¿a qué se debe eso?

-En realidad hay esperas larguísimas en la resolución de los procesos judiciales. Es algo endémico y hay quejas constantes de todos los profesionales que actúan en los juzgados. En el caso de los informes psicológicos hay factores muy claros, la evaluación psicológica de una persona no se realiza en media hora, en muchos procesos hay que evaluar a varias personas, lo que implica muchas más horas, hay pocos profesionales de la psicología en los IMLyCF y por tanto hay una sobrecarga importante.

En base a esto se ha firmado un convenio entre el Consejo general de la Psicología y el ministerio de Justicia, para reforzar con un turno de psicólogos y psicólogas forenses la labor de los IMLyCF en las Comunidades Autónomas de su competencia, como es el caso de Extremadura. Desde el COPEX gestionamos lo concerniente a este convenio en nuestro territorio, pero la solución pasa por aumentar el número de plazas de psicología jurídica para darle a la población un mejor servicio.