El viernes se pondrá al cobro el impuesto de vehículos, el segundo en importancia que cobra el ayuntamiento tras el IBI. Son 58.347 recibos con una previsión de recaudación de 4.087.090 euros. El periodo de cobro voluntario es desde el viernes hasta el 20 de mayo. Los recibos que están domiciliados, que son mayoría (más del 70%), se cobrarán a primeros de abril. El resto de los contribuyentes podrán hacer efectivo el pago del impuesto en cualquiera de las entidades bancarias que colaboran con el organismo de recaudación y gestión tributaria de la diputación, que son todas salvo el BBVA.

Este año se pasarán al cobro más recibos que en 2015, cuando fueron 57.839. De esta manera se rompe la tendencia a la baja de los últimos años: en 2012 se emitieron 59.631 recibos; en 2013, 59.297; en 2014, 58.518; y en 2015 bajó hasta los 57.839.

Este año se cumple una década sin que las cantidades que se pagan por este tributo se hayan modificado. La última vez que el ayuntamiento aprobó una subida de este impuesto fue en 2004, cuando se acordó una subida a aplicar en dos años (2005 y 2006). De los tramos que tiene el impuesto, la mayoría de los recibos son de los turismos que tienen entre 12 y 19,99 caballos fiscales. En el tramo de 12 a 15,99 caballos fiscales se paga 100 euros por el vehículo. En el que está entre los 16 y los 19,99 se abonan 125. En el tramo con mayor importe, el de los vehículos que tienen de 20 caballos fiscales en adelante, se pagan 140 euros.

En cuanto al IBI, el gobierno local recordó el viernes que la Junta todavía adeuda 3.887.232 euros de este impuesto, de los que 311.736, correspondientes al periodo entre 1996 y 2002, ya habrían prescrito. También se detalló que Cáceres perdería 196.410 euros de los dos hospitales si finalmente, como pretende la Junta, estos bienes inmuebles quedan exentos.