Las auxiliares de enfermería de la Asistida continúan con las protestas para pedir más personal. Ayer llevaron a cabo una nueva concentración en la puerta del centro de mayores para exigir a la Junta de Extremadura, titular de la residencia, que se les dé una solución cuanto antes --celebran manifestaciones todas las mañanas a las 11.45 horas desde hace quince días--.

Tal y como publicara este diario a mediados de diciembre, las empleadas se quejan de que la falta de personal les impide atender de manera correcta a los usuarios. Denuncian que no se cumple la ratio que establece la normativa y que consiste en siete enfermos por cada trabajador. En el centro tocan a entre ocho y diez mayores por cada auxiliar, dependiendo de las jornadas. Hace unos días se reunieron con la gerente territorial, pero la reunión no fue fructífera. Han solicitado un nuevo encuentro con el Ejecutivo regional, pero aún no han recibido respuesta.

La residencia asiste a 320 usuarios. El mayor problema se da los fines de semana y los festivos, cuando la plantilla es inferior. El centro cuenta con cuatro plantas y esos días en cada una hay ocho auxiliares. Por las tardes la situación se complica todavía más porque en cada planta solo hay seis auxiliares; dos en el turno de noche.

Su trabajo diario consiste en levantar a los residentes, asearles, vestirles, darles de comer y administrarles la medicación, actividades que tienen cubiertas, pero a costa de "correr mucho". Según explican las auxiliares, la situación impide que puedan ofrecerles otras atenciones sociales, también necesarias para los usuarios. Muchos no tienen familia, por lo que no reciben visitas y están solos durante horas (para poder atender a todos los levantan a las 07.30 horas y los acuestan pasadas las 22.00 horas). "Nos demandan que les demos la mano, que nos quedemos un rato con ellos, que les demos compañía, pero no podemos por falta de tiempo", aseguraban las auxiliares hace unos días a este diario.