La primera cisterna llegó a las tres de la tarde de ayer, y a la memoria de todos los vecinos volvieron viejos tiempos de escasez casi olvidados. Pero no hay más opciones. El ayuntamiento cacereño, a través de Canal de Isabel II, empresa concesionaria del servicio, comenzó a abastecer ayer con cisternas a la pedanía de Rincón de Ballesteros, situada a 40 kilómetros de la capital, donde sus 200 vecinos llevan sin agua desde el pasado sábado.

El suministro de Rincón de Ballesteros llega a través de la Mancomunidad de Lácara Norte, en virtud de un convenio firmado por el ayuntamiento cacereño en 1996. La presión descendió hace semanas, pero desde el sábado apenas reciben un hilo de agua en las casas. El gerente de Canal de Isabel II, Gerardo Díaz, se reunió ayer con los responsables de la comarca y concretó el origen del problema: "La conducción de Rincón sale de Carmonita, que a su vez tiene un conducto muy pequeño sin capacidad para cubrir el aumento de población que se produce en verano. También sufre escasez".

Pero la red ni siquiera pertenece a Canal, sino a la Mancomunidad de Lácara. "Por tanto, no podemos aumentar el diámetro y solucionar el problema este verano. Habrá que sentarse, dialogar y estudiar soluciones", señaló el gerente. De momento, la única alternativa son las cisternas.

VUELVE EL AGUA Canal transportó ayer los dos primeros camiones hasta el depósito de la pedanía, limpiado por sus operarios para la ocasión. "Empezamos a recibir agua, no en exceso, pero suficiente después de estos cinco días de sequía", señaló la alcaldesa pedánea, Rufina Pascua. "Sabemos que es una opción esperpéntica y cara, pero no hay otra", lamentó Gerardo Díaz, que enviará tres cisternas a diario de 15 metros cúbicos. "De este modo paliaremos el déficit de la red, calculado en unos 50 metros cúbicos por día", precisó.

La solución de Canal hacía efectiva la promesa que horas antes había realizado el primer teniente de alcalde, Andrés Nevado, garantizando el suministro de agua. El responsable municipal mantuvo una conversación telefónica con el alcalde, José María Saponi, que está de vacaciones, en la que acordaron requerir a la Mancomunidad de Lácara la solución del problema.

Nevado recordó que la firma del convenio entre el ayuntamiento y la mancomunidad implica que el suministro a Rincón se realiza desde la presa Horno Tejero (de la que también se abastecen Puebla de Obando, Carmonita y La Roca de la Sierra). El edil insistió en que la cláusula sexta del acuerdo estipula: "El volumen de agua abastecida a Rincón de Ballesteros quedará condicionada en la misma medida y proporción que el de los miembros de la mancomunidad, aún en los casos de restricción por sequía, avería u otros imponderables".

El concejal cacereño fue tajante al decir que si en Rincón no hay agua, es que "el convenio se está incumpliendo". Y recordó: "El agua se viene pagando religiosamente por parte del ayuntamiento a la mancomunidad".

Por su parte, el presidente de Lácara Norte y alcalde de Puebla de Obando, Domingo Sánchez, comentó que el problema se ha ocasionado porque en verano hay más población en los municipios, aunque instó al ayuntamiento a que arreglase el depósito de reserva que existe en el pueblo. Además, recordó que ha remitido cartas a Saponi y a Sanidad advirtiendo de que podría haber riesgos para la salud de la población: "Ellos cogen el agua directamente de la red y nosotros cloramos en planta. Deberían comprobar que está en perfectas condiciones cuando llega a Rincón".

Nevado comentó que la solución definitiva no podía pasar por el arreglo de un depósito y que lo importante es que la presión sea la adecuada. Llamó al buen entendimiento para que se cumpla lo acordado. No obstante, ayer técnicos municipales y de Canal de Isabel II continuaban las actuaciones de mejora en el depósito de 8.000 litros para ponerlo en servicio.

Entretanto, la indignación vecinal continuaba a última hora de ayer y los afectados aseguraban que de sus grifos apenas cae agua desde hace cinco días.