Hace ya mas de una semana que este mismo diario publicaba las declaraciones del director general de Transportes, José González, en las que anunciaba que la partida incluida en los presupuestos de la Junta de 2017 destinada al aeródromo de Cáceres quedaría reducida a ¡25.000 euros!. Esto representa solamente un tercio del importe del estudio de impacto ambiental, que está pendiente desde que hace mas de dos años, fecha en la que se interrumpiera la ejecución del proyecto por la denuncia de una asociación ecologista.

Ello supone que el estudio no se va contratar hasta 2017 y posiblemente para 2018 podría ver la luz. ¡Tres años para hacer un estudio sobre un erial!, que además no tiene ningún tipo de protección medioambiental por estar fuera de las famosas CEPAS que nos circundan. Mientras tanto, la Consejera de Fomento anuncia que se invertirán 15 Millones de euros para iniciar antes de finales de año las obras de la Plataforma Logística de Badajoz. Esta es la proporción del trato que nuestras autoridades dan a las dos capitales de la región; 15.000.000/25.000.

De esta forma el ejecutivo autonómico demuestra la falta total de interés en un proyecto que fue impulsado en sus inicios por su propio grupo político, y la tomadura de pelo, una vez mas, hacia la ciudad de Cáceres. Seguro que lo están reservando para el próximo periodo electoral. ¿Recordais hace diez años al entonces presidente Ibarra anunciar a bombo y platillo un aeropuerto internacional para Cáceres?.

Lo peor de todo es que, trascurrida ya mas una semana desde las últimas declaraciones, no hemos visto que ninguna institución cacereña haya puesto el grito en el cielo ante este nuevo menosprecio. Ni Ayuntamiento, ni la Cámara de Comercio de Cáceres (que por cierto que de Cáceres ya no le queda nada), ni las asociaciones empresariales y sindicales.

Se ha producido también otro acontecimiento que demuestra, una vez mas, el total control que la provincia hermana tiene de todas las instituciones regionales, me refiero al pretencioso ‘Pacto social y político por el ferrocarril’. A simple vista nadie puede quejarse, por que en ese famoso Pacto se contenta a todos, ya que se demandan todas las conexiones ferroviarias pendientes o abandonadas. Pero, como los redactores del Pacto saben que es imposible pedir la luna, se han ocupado en señalar como objetivo primero del mismo; ‘Ejecutar un Plan Urgente de Renovación y Electrificación de las redes ferroviarias convencionales de Extremadura, empezando por la línea Badajoz-Mérida-Puertollano, instalando un intercambiador de ancho en Brazatortas para poder acceder a la línea de AVE Madrid-Sevilla’.

Ello quiere decir, que ante Madrid, los ¿extremeños? consideramos como mas prioritaria la renovación y electrificación de la línea Badajoz-Ciudad Real, que la finalización de la plataforma de doble vía electrificada de altas prestaciones que comunica; Badajoz-Mérida-Cáceres-Plasencia-Navalmoral-Madrid, con la que se articularía y concentraría el transporte de viajeros y mercancías de toda la región. Otra vez el famoso extinto Eje 16, totalmente abandonado por Europa, al que ya parece que no se atreven a nombrar. Es claro que si dividimos en dos ejes la comunicación ferroviaria entre Badajoz y Madrid y se realizan primero las inversiones de la salida por Ciudad Real, como sucediera en el siglo XIX, la línea de la plataforma de altas prestaciones se retrasará una vez mas, cuando debía se justamente al contrario, priorizar lo que realmente interesa a TODOS los extremeños y no solamente a una parte de ellos, aquellos que piensan que Extremadura limita al norte con la sierra de San Pedro.

La actitud de Cáceres y de los políticos Cacereños, recuerdan al famoso Don Tancredo que permanecía hierático dejando pasar el toro a su lado, temiendo que al moverse fuera a recibir una cornada. Mientras tanto son los cacereños en general los que las iremos sufriendo las cornadas por la falta de oportunidades de desarrollo de nuestra ciudad y su entorno..