Una de las fiestas más populares de Cáceres, Las Candelas, comenzó ayer con la mesa de ofrendas a las puertas de la ermita de la Candelaria situada en la calle San Ildefonso (junto a la plaza de Santa Clara). La celebración se inició con la misa que ofició el párroco titular de San Maateo, Paulino Hernández.
La conmemoración de Las Candelas sigue hoy con la bendición de velas, procesión y suelta de palomas. Por vez primera este programa se celebra por la tarde, a las 17.00. Paulino Hernández dijo que la decisión se produce después de que el año pasado parroquianos y vecinos solicitaran el cambio. La actividad comienza con la bendición de las velas, tras lo que se inicia la procesión de la Virgen de la Candelaria hasta San Mateo (iglesia titular de la que depende el templo menor), donde habrá misa.
El origen de la celebración de Las Candelas se remonta al siglo XIII y se basa en rendir tributo a la madre de Cristo --40 días después de su nacimiento-- portando en las manos candelas previamente bendecidas. Se conoce también como la fiesta de la purificación de la Virgen.
Ayer las roscas se vendieron a 1 euro. Se han puesto a la venta 500 y hoy se seguirán vendiendo. En la mesa de ofrendas hubo productos gastronómicos y de labores, todos cedidos por los vecinos. Los fondos se destinan al sostenimiento de la comunidad parroquial. Los niños de la guardería Guiñol acudieron vestidos con trajes regionales e interpretaron un baile.
